Declaración del rubro productivo
• El sector emitió un pronunciamiento en el cual expresó su malestar por el clima adverso que se presenta en Bolivia para las industrias, así como para la inversión nacional y extranjera
La industria expresó su preocupación porque el modelo económico implantado por el Gobierno en 2006 alienta la extinción del sector, ante la ausencia de políticas de Estado y un clima favorable destinado a la creación de empleo y producción.
“Los industriales manufactureros nos declaramos en proceso de extinción bajo el actual modelo económico”, apuntó el documento divulgado por la Cámara Nacional de Industrias, (CNI). Recordó que desde 2006 el Gobierno no ha generado incentivos para la diversificación productiva, agregación de valor, desarrollo tecnológico y de capital humano, lo cual pone en riesgo el crecimiento y desarrollo sostenible del sector”, expresa el documento.
Lamentaron también que no se haya logrado la llamada “revolución productiva”, que el Gobierno pregonó en la reciente década. “Una clara muestra del olvido del Gobierno fue en 2017, cuando el presidente Evo Morales, en su informe del 6 de Agosto, se olvidó de la industria manufacturera privada formal”.
Los industriales hicieron patente la desaceleración económica que vive el país desde 2013, por la ausencia de políticas públicas para el sector manufacturero y la falta de incentivos.
CONGRESO
Como conclusión del Congreso de Empresarios, realizado el martes en Santa Cruz, se emitió un pronunciamiento en el cual expresó su preocupación por el clima adverso que se presenta para las empresas industriales, así como para la inversión nacional y extranjera.
“En los últimos años, los industriales hemos expresado, en diferentes espacios públicos y privados, nuestra profunda preocupación por el clima de desaceleración económica y porque vivimos un escenario de exclusión del sector manufacturero en los planes y políticas públicas”, señaló el documento
EMPLEO Y PRODUCCIÓN
La entidad privada alertó que esta situación tendrá un impacto negativo sobre la inversión, producción y generación de empleo, aparte de que pone en riesgo el desarrollo del país.
Los directivos del sector industrial señalaron también que en los últimos espacios de diálogo y en las diferentes reuniones con autoridades del sector público hicieron conocer y ratificaron que las principales preocupaciones del sector son el creciente contrabando, el comercio informal, los ascendentes costos laborales, además de los controles y regulación de precios, la inflexible política laboral de desvinculación, sobrefiscalización y regulación del sector público a las industrias.
De la misma forma, incidieron en la presencia del Estado con empresas públicas en los mismos rubros que el privado, a lo que agregaron el incremento de la tarifa de gas industrial y, de la misma manera, el incremento de la tarifa eléctrica industrial, cuyos aspectos vuelven a los industriales cada vez menos competitivos.
Ante este escenario, la industria planteó siete demandas, en las que expresó observaciones sobre modelo económico del Gobierno, en especial las normas laborales y la ausencia de políticas para promover el desarrollo de la industria nacional.
SIETE PLANTEAMIENTOS DE LA INDUSTRIA
1. Expresamos nuestro absoluto y enérgico rechazo a la confiscatoria Ley de Empresas Sociales, al incremento salarial y al anuncio prematuro del pago del segundo aguinaldo 2018, que generan incertidumbre y ahuyentan inversiones.
2. Demandamos de manera firme y contundente que la relación entre el sector público y el sector privado debe ceñirse al marco constitucional de respeto a los derechos de la empresa privada.
3. Defendemos de manera particular el derecho a la propiedad privada y a la libertad de empresa y ratificamos que no existe desarrollo sin inversión privada nacional y extranjera.
4. Consideramos que el Gobierno debe asumir el compromiso de fomentar y propiciar la iniciativa privada, en un ambiente amigable a la inversión, que permita crecer y aportar al empleo formal.
5. Expresamos que para generar el desarrollo en el país y generar inversión y empleo es indispensable la generación de un clima de confianza, el cual no se construye atacando y acosando a los que precisamente invertimos y generamos empleo formal.
6. Consideramos que el sector privado debe dejar de ser funcional al sector público y exigimos que nos tomen en cuenta y con resultados concretos en el diálogo público-privado.
7. Requerimos un giro en el modelo económico, para iniciar un genuino proceso de industrialización y no ahondar la extinción de la industria privada nacional.
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