Entregaron camioneta de equipo periodístico

A más de un mes del asesinato de los trabajadores del diario El Comercio a manos de disidentes de las FARC, la policía ecuatoriana devolvió la camioneta de Efraín Segarra, familiar de una de las víctimas. El vehículo será trasladado al centro de Quito, donde realizarán una caravana simbólica en memoria de los tres ecuatorianos asesinados.

La cadena internacional CNN fue una de los primeros medios en reflejar el dolor de los familiares, cuando recibieron el motorizado.

“Todavía no puedo creer que solo reciba la camioneta y que mi padre no esté aquí”, esas fueron las palabras de Cristian Segarra, ayer a El Comercio, luego de recibir la camioneta azul, propiedad de su padre Efraín Segarra.

SILENCIO

En medio de un silencioso sollozo, Segarra se acercó al vehículo empolvado, que se encontraba retenido en un patio vehicular de la Policía Judicial, en el norte de Quito.

Lo revisó por fuera y logró abrir el vehículo con una llave que su padre había ocultado en el guarda fango. Para Segarra fue un momento doloroso sentarse en el asiento de su padre.

“Tengo la imagen de mi padre. Se me vienen tantos recuerdos de él, de las coberturas que hicimos, de mis amigos...”, dijo Segarra El Comercio.

Además, “la comunicación se ha cerrado, no sabemos qué es lo que están haciendo para recuperar los cuerpos”, dijo a EFE Christian Segarra, hijo del chófer asesinado.

El acto arrancó ayer en la Tribuna de los Shirys, en el centro norte de la capital ecuatoriana, donde llegó la camioneta en un remolque de la Policía Nacional ecuatoriana.

Los familiares procedieron a limpiar el barro del vehículo y a decorarlo con flores blancas y carteles que rezaban: “Siempre nos faltarán tres”, antes de que encabezara la procesión que concluyó por la tarde en el mismo periódico donde trabajaban, El Comercio.

OPERATIVO

Hasta ese patio vehicular llegó el automotor, tras ser recuperado en un operativo que se realizó en Mataje, en abril.

Ayer, el vehículo fue subido a una plataforma para trasladarlo a la Tribuna De Los Shyris. Desde allí está previsto realizar una caravana con destino a la planta del periódico, en el sur de la ciudad.

Para Segarra esa movilización prentende visibilizar el caso y protestar porque los cuerpos del equipo periodístico no han retornado al Ecuador.

“Después de dos meses hoy recibo esto que es un cosa física, pero los cuerpos aún siguen allá. Y queremos que nadie se olvide que nos faltan tres”, señaló el familiar a El Comercio.

Además, Cristian dio a conocer que la devolución de otras pertenencias no se pudo efectuar ayer porque uno de los tres representantes de las familias se encuentra delicado de salud. “Para la recepción deben estar presentes los tres parientes”, señaló.

Ricardo Rivas, hermano de Paúl Rivas, dijo que entre las pertenencias que la Fiscalía dispuso que se entreguen hay “la ropa, un chaleco, parece que está el celular de Paúl, las credenciales de El Comercio, parece que alguna billetera con todos sus documentos, de lo que recuerdo”.

ANTECEDENTES

El periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y Segarra fueron secuestrados el 26 de marzo por disidentes de las FARC en la frontera de Ecuador y Colombia antes de ser asesinados. Sus restos no han podido ser localizados para su repatriación. La Cruz Roja Internacional ha dicho que los guerrilleros no se han contactado para entregar las coordenadas en que están los restos, informó el portal del Metroecuador.

Al recibir la camioneta, que por pericias judiciales no pudo ser entregada antes, el hijo de Segarra añadió que es doloroso que “que no haya esclarecimiento de qué les ocurrió, darnos cuenta que por irresponsabilidad de quienes debían darles seguridad ya no están con nosotros”.

En la frontera de ambos países, cerca del océano Pacífico, desde enero se registran ataques a bala y atentados explosivos por parte de los disidentes de las FARC que causaron la muerte a cuatro militares. Esos grupos armados también secuestraron a otros dos jóvenes comerciantes a mediados de abril y desde entonces no se conoce su situación o paradero.

Los disidentes de las FARC exigían al gobierno del presidente Lenín Moreno la entrega de tres de sus integrantes detenidos en suelo ecuatoriano y que el país rompa un convenio antidrogas con su par colombiano.

Según la agencia EFE, Desde entonces sus restos están en paradero desconocido, pese a los llamamientos de los Gobiernos de Ecuador y Colombia, y la disposición de organizaciones como la Cruz Roja Internacional para recuperar los cuerpos, lo que ha llevado a los familiares a seguir una campaña regional para lograr una pronta solución a su situación. (Agencias)