Puerto de Ilo requiere grandes inversiones

Desde la década del 80, cuando fueron formalizados los convenios de Bolivia con el Perú para el posible aprovechamiento del Puerto de Ilo, se aseguró que la infraestructura portuaria no era suficiente para cubrir las necesidades de importación y exportación de nuestro país. Ya entonces se sostuvo la urgencia de realizar grandes inversiones con miras a habilitar un puerto que sea útil para el Perú y para Bolivia; pero descuidos y hasta nomeimportismos de ambos gobiernos no dieron lugar a que se formule o planifique medios y sistemas para concretar estudios e inversión para hacer realidad los acuerdos firmados.

Desde hace varios años, ante las arbitrariedades que se comete en contra del país por parte de autoridades tanto de Arica como de Iquique, se adoptó el propósito de concretar acuerdos con el Perú con miras a habilitar efectivamente el puerto de Ilo; pero, que se sepa, hasta ahora no se ha dado los pasos necesarios. Hace un par de semanas, casi accidentalmente, una nave con bandera panameña se vio obligada a atracar en el puerto de Ilo “debido a dificultades en el puerto de Arica”. La nave contiene 9.000 toneladas de carga destinada a Bolivia. Fue una oportunidad para demostrar que ese puerto tendría posibilidades para aceptar a buques y naves de alto tonelaje; pero se coincidió, además, en que precisa, con urgencia, la conclusión de una infraestructura que permita efectivamente labores de importación y exportación, que reemplace, de algún modo, lo que se hace por puertos chilenos.

La información añade que la carga (en varios “conteiner”) debe ser recogida mediante camiones, por empresarios bolivianos. Éstos, a su vez, consideran la posibilidad de utilizar en el futuro algunas de esas instalaciones y creen que la carga destinada para ellos al puerto de Arica, será transportada más o menos con la utilización de 500 camiones.

Ilo se perfiló siempre en los últimos 30 años como una posibilidad para reemplazar, siquiera en parte, las importaciones y exportaciones vía puertos chilenos; pero si hay algo que reprochar a los gobiernos, desde el año 1992, cuando fueron firmadas las primeras intenciones conjuntamente el presidente Alberto Fujimori y su homólogo Jaime Paz Zamora, es que todo haya quedado en simples declaraciones. Últimamente, en reunión habida entre presidentes de Perú y Bolivia se convino que es urgente “encarar lo que debe hacerse en Ilo”.

Muchas veces se ha sostenido que, por parte nuestra, es urgente concluir la carretera que une a Bolivia con Ilo; pero tampoco se hizo anuncio alguno sobre lo que se habría estudiado al respecto y menos que se haya hecho cálculos sobre presupuestos de costos y otros. En pocas líneas, el descuido se hace característica en quienes deben adoptar decisiones importantes a favor del país. Ojalá que la carga llegada a Ilo sea transportada por los empresarios destinatarios y no quede almacenada indefinidamente en dicho puerto.