El volcán de Fuego, ubicado a unos 50 kilómetros al oeste de la capital de Guatemala, inició ayer una nueva erupción, la segunda este año, con fuertes explosiones y una columna de ceniza que se alza a 6.000 metros de altura sobre el nivel del mar.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) explicó que la erupción genera flujos piroclásticos –nubes ardientes que descienden del volcán–, en dirección de las barrancas Seca o Santa Teresa y posiblemente a Cenizas.
La ceniza de las columnas de los flujos piroclásticos se desplazan sobre la aldea Sangre de Cristo y el municipio de San Pedro Yepocapa.
Al menos 300 trabajadores de dos fincas ubicadas en las faldas del coloso fueron enviados a sus viviendas con el fin de evitar cualquier incidente, informaron las autoridades.