La fuga de amoniaco de la planta de fertilizantes que opera en Bulo Bulo, Cochabamba, ha puesto en alerta a expertos, quienes formularon recomendaciones y lanzaron la hipótesis en sentido de que se trataría de “errores humanos” y de la tecnología que no domina la japonesa Samsung. Estas opiniones surgieron ante la falta de transparencia de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) sobre las causas y las consecuencias de este grave incidente, el mismo que fue minimizado por sus autoridades.