A Leandro le gana la burocracia

Luego de transcurrir más de un año, desde que don Leandro Limachi iniciara sus gestiones para obtener un permiso para un puesto de venta, a pesar de cumplir con la entrega de toda la documentación a la Alcaldía, los trámites se dejan esperar. Él aguarda pacientemente que las autoridades municipales finalmente escuchen su pedido y lo ayuden para que obtenga anaquel.

Don Leandro es una persona con discapacidad que hace más de un año espera pacientemente la conclusión de sus trámites en la Subalcaldía de la zona Sur que, pese a la entregar de toda la documentación, aún no puede contar con su anhelado permiso de venta.

El año pasado don Leandro inició sus trámites en la Subalcaldía de la zona Sur, con la esperanza de contar con una licencia para instalar un anaquel en el lugar donde a diario vende sus pequeños productos.

El peregrinar de Leandro a la Dirección de Promoción Económica de la Subalcaldía de la zona Sur se tornó constante en procura de la autorización que le permita seguir vendiendo, considerando que cuenta con la autorización de los dueños del bien inmueble, en cuyos predios se encuentra su puesto de venta.

Con este fin, en diciembre de 2017, Leandro inició una cruzada para hacer realidad sus sueños de contar con una licencia que le permita contar con un pequeño anaquel que le ayude económicamente y no ser una “carga para su familia”.

Producto de esta acción recibió varias manifestaciones de apoyo e incluso el subalcalde de la zona Sur, Oscar Sogliano, admitió conocer la situación y dijo estar dispuesto a buscar una solución al problema.

LEYES

El 2016, la Alcaldía aprobó la Ley de protección a las Personas con Discapacidad, donde se establece el fomento a la formación técnica de este sector, a través de programas de inserción laboral dentro de una política de inclusión laboral, pero en esta ocasión la misma se estaría vulnerando, porque lejos de “promover la actividad laboral de Leandro” se le estaría impidiendo su derecho a trabajar.