Justicia declaró en quiebra constructora

Buenos Aires.- Una jueza argentina dispuso ayer la quiebra de Austral Construcciones, cuyo principal accionista es el detenido empresario Lázaro Báez, quien supuestamente utilizó la firma para incurrir en un fraude al Estado durante el mandato de Cristina Fernández, confirmaron ayer fuentes judiciales.

La magistrada en lo comercial María José Gigy Traynor declaró en quiebra a la constructora, perteneciente al grupo Austral, que, según una investigación judicial, resultó beneficiado con casi la totalidad de las obras viales licitadas en la sureña provincia de Santa Cruz durante 12 años de gobiernos kirchneristas (2003-2015).

PROCESADOS

Por esta causa, a cargo del juez Julián Ercolini, se encuentran procesados -además de Báez- el detenido exministro de Planificación Julio de Vido (2003-2015) y la expresidenta argentina Cristina Fernández (2007-2015), quien está acusada de delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta.

El expediente, abierto tras una denuncia formulada en 2008 por, entre otros, la diputada oficialista Elisa Carrió -entonces opositora-, estudia un supuesto esquema de “beneficios exclusivos” a favor de Austral y en detrimento de las arcas del Estado.

Paralelamente, el pasado 13 de junio, el juez Sebastián Casanello procesó a Ricardo Echegaray, titular del Fisco de Argentina durante el Gobierno de Fernández, debido a su presunta participación en la falsificación de facturas fiscales de la constructora de Báez.

LAVADO DE DINERO

El empresario lleva detenido desde 2016 por decisión del mismo Casanello, quien lo acusa de integrar una red de lavado de dinero proveniente de la adjudicación de obra pública en Santa Cruz.

Además, hace un año, en el marco de otra causa, el juez procesó a Báez y a sus hijos Martín, Leandro, Sabrina y Melina por integrar “un entramado societario offshore” que supuestamente desvió unos 60 millones de dólares entre 2010 y 2013. (EFE)