Enfermos renales piden mejores servicios

Los enfermos renales, al mediodía de ayer, se movilizaron en inmediaciones del Hospital Obrero, demandando mejores servicios. Los pacientes expresaron su protesta por la baja calidad de medicamentos, la falta de infraestructura, entre otros. El vicepresidente de la Asociación de Dializados y Trasplantados de la Caja Nacional de Salud (CNS), Mauricio Beltrán, advirtió que de no haber respuesta a sus pedidos instalarán un piquete de huelga de hambre.

Señaló que los medicamentos de procedencia Hindú, que actualmente entrega la Caja Nacional Salud (CNS), no coadyuvan al buen tratamiento de los enfermos renales, al contrario se pone en riesgo de un trasplante a muchos enfermos, que por otra parte es difícil de conseguir.

Detalló que dentro del Hospital Obrero, se tiene alrededor de 280 pacientes con una patología renal; aseguró que algunos deben buscar la compra de servicios particulares. En El Alto y la zona Sur se tiene alrededor de 300 pacientes y cerca de 148 pacientes trasplantados, lo que hace un total de más de 600 enfermos renales.

Aseguró que los problemas van desde limitaciones en la infraestructura, en diferentes unidades como hemodiálisis, trasplante, hasta la falta de calidad en los medicamentos.

Indicó que son seis puntos de demandas que se arrastra por años, entre ellos se encuentra el cambio del jefe de Nefrología del Hospital Obrero, debido a que no ayuda a los pacientes y mucho menos a los enfermos trasplantados.

Asimismo, piden mejorar las atenciones de análisis de laboratorio y mejorar la calidad de medicamentos e insumos. “A partir de esta gestión quieren imponer medicamentos de origen hindú, que por su baja calidad no ayuda a la mejora de los enfermos renales”, señaló.

Los enfermos renales también reclamaron por la infraestructura de hemodiálisis que se encuentra continuamente colapsada, por lo que continuamente se busca la compra de servicios, para que los pacientes sean atendidos.

Piden que se eliminen los turnos trasnoche, pues los enfermos renales lo consideran un turno inhumano, deben ingresar por un tratamiento de diálisis a la una de la mañana y salir aproximadamente a las cinco de la madrugada.

“Necesitamos una ampliación urgente, un proyecto que fue prometido y hasta el día de hoy no se lo ejecuta. Hace tres años que se comprometieron a construir un nuevo bloque, pero no puede concretarse”, dijeron.