I
Recordamos a un personaje paceño muy particular, nos referimos a la “chola paceña”, mujer trabajadora y valiente, que en muchos casos es el sostén del núcleo familiar.
Se dice que en 1782 la Corona española emitió una disposición que prohibía que las mujeres originarias vistieran ropa indígena y se las obligó a vestir ropa que imitara la vestimenta de las mujeres campesinas españolas. Así empezó el cambio en la vestimenta de la población originaria y mestiza, de las alturas de lo que hoy es Bolivia (La Paz), de los trajes originarios hacia el traje de chola, en evolución permanente de acuerdo con la moda y los requerimientos de trabajo diarios. El traje originario, de seguro, principalmente contaba con los característicos ponchos, aguayo y otros.
En relación con el denominativo “chola”, existen muchas teorías, una señala que deriva de la palabra “chula”, con la cual se denominaba a la mujer del pueblo en Madrid-España.
El traje de la “chola paceña”, fruto de este proceso evolutivo, en la mayoría de los casos tiene los siguientes componentes: Un sombrero importado marca Borsalino (de copa alta o baja, según la moda), el cual llegó a la ciudad de La Paz en la década de 1920, importado por don Domingo Soligno, se dice para los empleados de origen inglés que trabajaban en la conocida empresa de ferrocarriles inglesa de esa época, era el “bombín inglés”.
Seguramente a las mujeres de esa época les llamó la atención ese sombrero, apropiándoselo para su vestimenta. Algunos de los sombreros eran muy caros, teniendo en muchos de los casos su precio en dólares americanos. Vienen en colores negro, café y plomo principalmente.
La “chola paceña” también llevaba y lleva una blusa con estampados. Debajo lucía un corpiño que moldeaba su figura. Viste asimismo una “manta de encima”, asegurada en la parte de adelante, en la ropa de diario, por un gancho metálico y en los días festivos por un “topo” o prendedor de oro con perlas. La manta es rectangular, doble y lleva largos flecos. Las mantas más finas eran de seda. Con el tiempo también la “chola paceña” llegó a vestir una manta tejida con lana de vicuña, estas mantas son muy caras. Lleva una “manta de pecho” que puede ser de seda y es triangular. Se utiliza para cubrir el pecho.
Por otro lado luce una pollera, la cual consta de cinco alforzas, bastas o pliegues. Conforme cambia la moda, suelen variar el número y ancho de las alforzas. El borde inferior de la pollera llega hasta más abajo de las rodillas. Existían y existen polleras de bayeta de colores chillones (anaranjado, verde), bayetas teñidas con colorantes naturales. También se confeccionó polleras con telas importadas. Esta prenda de vestir tiene un forro interno de tocuyo.
La pollera podía en la mujer del campo, ser sujetada también por una faja. Debajo de las polleras lleva unas enaguas que son llamadas también “centros” o “mankanchas”, las mismas que bajan hasta la misma altura que la pollera. Usaba medias nylon.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |