China usa drones pájaro para tener más vigilados a los ciudadanos

Hace ya unos cuantos años que tenemos cámaras por todas partes y casi todos los edificios y calles cuentan con algún sistema u otro de videovigilancia para guardar nuestra seguridad. Sin duda las cámaras son fundamentales para la seguridad ciudadana y cómo no, para la investigación de determinados delitos, en el caso de que se den sobre cualquier punto del mapa.

Pero China ha ido un paso más allá para vigilar más de cerca a sus ciudadanos, con el despliegue de unos drones en forma de pájaro. Son drones de alta tecnología, pero lo cierto es que están perfectamente camuflados dentro de un pájaro de postín, que a lo lejos parece muy pero que muy real. Es una manera de no ensuciar el paisaje con artilugios extraños, pero sobre todo, de conseguir que la vigilancia pase completamente desapercibida para los ciudadanos.

Pero ojo, que no estamos ante una nueva campaña para incrementar la vigilancia sobre el pueblo. En realidad, este sistema de vigilancia ha sido usado en los últimos años por nada más y nada menos 30 agencias militares y gubernamentales chinas. Este control se ha llevado a cabo, al menos en cinco provincias chinas.

Este proyecto en su momento fue bautizado como Dove. Este ha sido dirigido por Song Bifeng, profesor de la Universidad Politécnica de Northwestern en Xi’an, científico de alto rango en Chengdu J-20, el considerado primer jet de combate de sigilo de quinta generación en el continente asiático.

Los drones son capaces de aletear como un pájaro de verdad. Lo hacen a través de los balancines, que al mismo tiempo son accionados por un motor eléctrico. Los drones, lógicamente, llevan en su interior cual caballo de troya una cámara de alta definición, una antena GPS y un sistema de control de vuelo.

De momento, los pájaros drones se están usando a pequeña escala, pero los expertos consideran que en un futuro podrán desplegarse en muchas más regiones y ámbitos.