Continúan abasteciendo combustible a vehículos indocumentados

En el municipio de Chulumani, a 123 kilómetros de distancia de la sede de Gobierno, EL DIARIO evidenció no sólo un aumento de vehículos indocumentados (también conocidos como ‘chutos’), sino que muchos de ellos reciben combustible de los surtidores, donde la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) no exige requisitos que aplica en el sector urbano.

En cada calle de esta localidad vagonetas, Caldina, minibuses carri o de 14 pasajeros, camionetas y sobre todo motocicletas están parqueadas o circulan en gran cantidad, generando congestionamiento en las estrechas vías.

En su mayoría, los conductores de los vehículos ‘chutos’ son vecinos o pobladores de la misma región, quienes destinan los motorizados para el transporte público y uso personal

En Chulumani, es el propio municipio que tienen conocimiento sobre la construcción de nuevos surtidores de combustible, donde los vehículos indocumentados pueden recibir con toda normalidad el combustible que les permite seguir operando en el servicio de transporte usual de las regiones en sud Yungas.

“Hay bastante taxi, radiotaxi y minibuses, como ha crecido la población y muchos viajan a las otras regiones como Irupana, Coripata y Tacacoma. Por lo general los vehículos sin placas de control son los únicos que tenemos en esta región”, explicó Juana Martínez, una de las comerciantes de Chulumani.

Para el 2017 la población de Chulumani llegaba a 20.200 habitantes, quienes ante el incremento de la producción de hoja de coca, granjas avícolas y producción fructífera tomaron como medio de transporte los vehículos indocumentados.

Pero por lo general, los pobladores de Chulumani desconocen que los accidentes de tránsito que son reportados en las localidades, cuando se involucra a un vehículos “sin papeles” por lo general, los afectados no logran ser favorecidos con el Seguro Contra Accidentes (SOAT), quedando en total abandono y con mayores gastos en las atenciones de salud.

“En los accidentes de vehículos ‘chutos’, no hay SOAT que llegue a cubrir los gastos, porque al no tener la documentación de internación conforme a la norma, tampoco tienen la inspección que demanda Tránsito, por lo que no se tiene ninguna garantía”, explicó el director del Organismos de Tránsito en El Alto, coronel Pablo García.

Otra de las problemáticas que se presenta en estas poblaciones de sud Yungas, es que existe riesgo de que pobladores que adquieren vehículos indocumentados hayan sido obtenido producto de otro ilícito, producto de robo en ciudades como La Paz, El Alto.

“Es un mercado atractivo para la venta de vehículos robados, porque son ofertados como si fueran chutos y por lo general, como solo los utilizan al interior de estas poblaciones, es casi imposible hacer control de todos los vehículos que operan en el sector de sud Yungas”, explicó uno de los investigadores de Diprove.

EL DIARIO buscó a la autoridad municipal de Chulumani para conocer las tareas asumidas frente al aumento de vehículos indocumentados, pero se evidenció que Vladimir Vega Morales (MAS), desde los conflictos de abril del presente año, continúa gobernando desde Huancané, dejando en total abandono a la oficina municipal de Chulumani.