A quitarse el sombrero ante las campeonas mundiales

El pasado domingo 19 de agosto, nuestras estrellas YASMINE SABJA y VALERIA CENTELLAS hicieron vibrar a los bolivianos que se encontraban en San José de Costa Rica, cuando se entonó el himno de nuestra Patria luego de vencer en un dramático encuentro con sus pares de México, favoritas antes del partido, conquistando el Mundial de Raquetbol en dobles.

Lastimosamente a esta conquista hasta la fecha no le hemos dado su verdadero valor y significado. Señores, somos CAMPEONES DEL MUNDO EN RAQUETBOL EN DOBLES DAMAS de las manos de una joven cochabambina de 16 años de edad y una dama cruceña de 27 años esposa y madre de tres niños. Dos polos opuestos en edades y responsabilidades en su diario vivir, que tuvieron que entrenar seis horas diarias durante medio año para llegar en excelentes condiciones al Mundial.

Pero para llegar a esta cúspide, nuestras estrellas practicaron este deporte desde muy niñas acompañadas de sus padres que no escatimaron esfuerzos en su preparación sin ninguna ayuda del gobierno ni en los uniformes deportivos y ahí están los resultados, son campeonas mundiales.

Este esfuerzo nos motiva para invitar a la empresa privada a no solamente que empiecen a patrocinar a nuestras campeonas sino también a nuestros varones campeones, ya que con un poco de esfuerzo se puede conseguir un terreno donde construir canchas de raquetbol para que esta conquista no quede simplemente como un recuerdo y que Cochabamba se convierta en el semillero de este deporte, porque del gobierno poco o nada podemos esperar y como ejemplo es que ni siquiera hubo una felicitación pública del Ministerio de Deportes por este magnífico logro, pero que para cerrar herméticamente los escenarios donde se realizaron los JUEGOS ODESUR están prestos, ya que en la actualidad ni siquiera los conciudadanos de otros departamentos al de Cochabamba los pueden visitar según denunciaron en oportunidad de su estadía con motivo de la fiesta de la Virgen de Urkupiña, señalando además que ya empezaron a subastar los ambientes de la Villa Olímpica, de donde deducimos que nuestros atletas si no cuentan con escenarios al margen de los pasados juegos, abandonarán sus prácticas.

El escenario de raquetbol que proponemos para que la empresa privada las efectivice, es fundamental en este momento porque corremos el riesgo como en otros deportes, que nuestros representantes abandonen el país a invitación de otras naciones para que los representen, brindándoles infraestructuras de punta, atención personalizada y sueldos mensuales acordes a su categoría de campeones. Esperemos tener una respuesta cuanto antes a esta noble pretensión.

Finalmente, como la ciudad de Tandil es el semillero de los tenistas en Argentina que participan en los circuitos mundiales con los mejores del orbe, Cochabamba de Bolivia debería convertirse para el mundo en la cuna de raquetbolistas y que no solamente sea conocida como el centro de la COCA-COCAINA Y NARCOTRÁFICO como etiqueta de producción.

Dr. Edgar Linares Mariscal,

fundador y ex asesor legal de Fabol