Políticos de oposición obligados a las carreras

No obstante que tanto el partido de gobierno como los partidos que conforman la oposición sostuvieron varias veces que “las elecciones aún están lejos”, todo muestra que tanto el presidente Morales como su Vicepresidente y su partido político MAS, estuvieron el mismo tiempo en preparación de lo que vendría con la aprobación de la nueva Ley de Organizaciones Políticas y, mucho más, con la posible realización de “elecciones primarias” (al estilo EEUU, a quien se imita aunque protestando contra él). Por lo avanzado hasta ahora a niveles oficiales, se ve, con claridad meridiana, que elecciones del 2019 están muy cerca.

Esta realidad ha tomado de sorpresa a la colectividad y seguramente mucho más a los partidos políticos al ver que el MAS se adelantó a todo, no dejó ventaja alguna para nadie, se mostró cauto y prudente seguramente para que la oposición radicalice mucho más sus descuidos, divisiones, indiferencias, posiciones contrapuestas, confrontaciones y muchos otros problemas que los ha dividido cada vez más. Hasta ahora, ocurre que el pueblo repite las preguntas que desde hace tiempo se hizo: ¿Qué harán esas corrientes políticas de oposición? ¿Cuáles son sus perspectivas para el futuro? ¿Encontrarán cauces que les permita obrar coherentemente hasta llegar a la unidad? ¿Serán capaces de renunciamiento en aras de lo que el país precisa? ¿Seguirán con el absurdo de que “cada uno se vale por si mismo y hará lo que crea más conveniente”?

Cuando se trata de establecer cuáles son las corrientes políticas que, unidas o no, sean capaces de hacerle frente a la candidatura de re-re-relección oficial. ¿Serán capaces de entenderse, agruparse, reunirse y, unidos, buscar posibilidades para el futuro? ¿Creen que habrá la suficiente conciencia de país en todos ellos como para renunciamientos en aras de aprovechar, hasta octubre, lo que tendrán que hacer con miras a las “elecciones primarias” tan novedosas para el país? El pueblo, siempre ingenuo y hasta inocente, no termina de preguntarse: ¿quiénes son las ‘cabezas visibles’ de los partidos de oposición? ¿Qué ideología tienen y qué perspectivas le ven a su organización política? Surgirá alguno, como antes de la anterior elección, que sostenga tener asegurados el 74% de los electores y ya se sentía presidente del país? En fin, la situación es tan nebulosa, tan difícil de entender, tan problemática y tan cuestionable, que se hace imposible preveer qué es lo que podría ocurrir en las próximas semanas.

Los partidos de oposición tienen que convenir con una verdad: mientras ellos muestren poco o ningun interés en la unidad, el partido de gobierno, pese a sus diferencias y hasta deserciones, hace todo para consolidar el sistema impuesto a partir del año 2006 y que culmina con la ambición de relecciones indefinidas, no obstante lo terminante que es la Constitución Política del Estado y la voluntad soberana del pueblo con su expresión clara y contundente: Bolivia dijo no. Ellos, como políticos muestran pleno acuerdo con los resultados de febrero de 2016; pero, no lo demuestran así y, ahora, se ven conminados a correr para alcanzar a organizarse (ojalá unirse) hasta octubre; el tiempo de que disponen es mínimo, pero, ¿podrán alcanzar su máxima expresión tanto la voluntad para servir al país, intervenir en las elecciones y actuar solidaria y mancomunadamente unidos?

El gobierno está tranquilo con los resultados alcanzados y que tienen plena aprobación del Tribunal Constitucional y, por supuesto, del Organo Supremo Electoral que, está visto, hará siempre lo que el gobierno quiera y disponga.

Es grave y terminante el desafío del gobierno y su partido con la aprobación de la Ley de Organizaciones Políticas y habrá que ver cuál será la reacción y futuro comportamiento de la oposición; esta es interrogante para toda la colectividad nacional con inclusión del gobierno y sus partidarios que seguramente esperan resultados que consoliden su posición o no; que les muestre que los partidos políticos, pese al poco tiempo que tienen para organizarse, tiempo que es adverso, cómo reaccionarán y con qué perspectivas.

La Ley de Organizaciones Políticas tiene serias deficiencias; pero, es así como la han concebido quienes buscan que el MAS se eternice en el poder “porque tiene que cumplir con el sistema impuesto el año 2006”. Estas son realidades que no cabe ignorar y que tienen que hacer pensar a los opositores, especialmente si se piensa que el régimen y su partido se han propuesto, pese al resultado adverso del 21 de febrero, intervenir en las elecciones in importar si es re-re-relección ilegal o no; lo que interesa es seguir en el poder y no soltarlo “pese a lo que se diga o haga”.

Los partidos políticos y organizaciones de oposición tienen lanzado el reto y habrá que ver cómo termina la especie de “zafarrancho o intríngulis” que se ha armado. El resultado de estos días es simple y llano: el gobierno sin más preocupaciones porque ganó, una vez más, la partida; la oposición tendrá que dejar la competencia de posiciones y convicciones de que “ellos lo pueden todo” y no muestran cómo; en fin, todos son seres que viven atenidos a sus propias circunstancias y competencias y, en este marco, sólo les falta unión y tener conciencia de país.