Bolivia y Chile agudizan tono antes del fallo de La Haya

A nueve días de la conclusión del proceso internacional entre Bolivia y Chile por la centenaria aspiración de retornar a las costas del mar en el caso denominado la “Obligación de negociar a un acceso al Océano Pacífico”, autoridades de Bolivia y Chile agudizan sus tonos y lanzan mutuas acusaciones en medio de hipótesis de la sentencia.

El canciller chileno, Roberto Ampuero, adelantándose al fallo de los jueces de La Haya descartó cualquier posibilidad de negociación sobre la soberanía de su territorio.

“Quiero recordar que Bolivia pidió que se obligara a Chile a negociar territorio soberano, pidió una transferencia de territorio, (pero) si a Chile no se le obliga a negociar territorio soberano, será un pésimo resultado para el presidente Evo Morales”, agregó Ampuero, según Emol.

Asimismo, afirmó que Morales ahora afectado por una suerte de amnesia, dice que se contenta solamente con dialogar. Por tanto, sufrió “un gran viraje y ustedes saben que Chile siempre ha estado dispuesto a dialogar para conversar bajo el paraguas del Tratado de 1904”, indicó.

Apuntó que Morales, en estos días, optó por olvidar lo que habló en el pasado en el sentido de que Antofagasta, con este juicio, iba a ser boliviana o que banderas de Bolivia iban a flamear en el mar chileno.

Entretanto, el agente boliviano, Eduardo Rodríguez Veltzé, sostuvo que las “desmedidas expresiones” del canciller chileno sólo reafirman las razones por las que Bolivia acudió a la CIJ.

“Persiste la falta de voluntad para resolver en paz y de común acuerdo una solución a 139 años de controversia. La decisión de la Corte es esencial para enfrentar el futuro”, señaló Rodríguez, mediante su cuenta en Twitter.

Por su lado el canciller Diego Pary afirmó que su homólogo chileno provoca, confunde y falta el respeto con sus declaraciones respecto a la demanda marítima y las intenciones que tiene el Gobierno de Evo Morales en torno a ese tema.

Pary, en conferencia de prensa, señaló que la demanda boliviana “está sólidamente solventada en documentos de orden histórico y jurídico” y sostuvo que las declaraciones de Ampuero “no corresponden a la verdad ni el respeto que merecen nuestros pueblos nuestras autoridades y la Corte Internacional de Justicia de La Haya”.