Charles Aznavour, último gran representante de la canción francesa, falleció la madrugada de ayer, a los 94 años de edad en su domicilio de Alpilles, en el sur de Francia, informaron agencias internacionales de noticias.
El intérprete de origen armenio, que dejó como legado las emblemáticas canciones como: “La Bohème”, “Je m’voyais déjà” o “For me formidable”, acababa de regresar de una gira por Japón.
El pasado verano, una caída le provocó una fractura de un brazo y le obligó a anular varios conciertos.