Declina producción de gas

Desde hace un par de años, la empresa estatal del petróleo ha suspendido o reducido su tarea exploratoria, por lo que las cifras sobre las proyecciones de producción de hidrocarburos muestran una tendencia declinante. En efecto, en el presente año se está registrando una menor producción de gas natural y tiende a prolongarse por lo menos hasta el año 2020.

Dos factores pueden estar influyendo en esta situación. Por una menor exploración o por la falta de inversiones en esta actividad. Al respecto, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) dejó de emitir sus boletines de información acerca de la labor diaria que cumple. De esta manera, no se conoce con la propiedad necesaria su situación.

En todo caso, el problema concierne al Gobierno, pues depende del financiamiento oficial lo que pueda o no hacer YPFB, tanto en el orden de exploración como de producción.

Si en la actualidad carece de medios para financiar la exploración, no se justifica que hubiera gastado millones de dólares en construir un edificio nuevo, nada menos que en el paseo de El Prado, donde todo cuesta más.

Pues el que tiene en la calle Bueno, frente al mercado Camacho, es suficiente para su funcionamiento y disponer inclusive con personal excedente, lo que es posible suponer, porque YPFB ya no explora ni produce hidrocarburos, esto lo hacen actualmente empresas privadas.

Entonces, todo lo que hace es seguir el funcionamiento de las mismas y recibir los ingresos que le corresponde percibir. Para eso no requiere contar con tanto personal, pues sólo este sería el justificativo para que construya otro edificio, de impactante prestancia y calidad, ante la falta de espacios en el edificio que dispone al presente.

Al respecto, empero, cabe un apunte. El edificio de El Prado fue terminado de construir hace meses y hasta ahora permanece vacío, no es utilizado, lo que podría demostrar que, efectivamente, no se requería otro edificio más.

En todo caso, siempre hay solución en los casos de administración de recursos. Si el nuevo edificio permanece vacío por tantos meses, desde que se terminó de construirlo, sería apropiado venderlo y, de esa manera, efectuar un buen negocio, pues se hallaría en condiciones de recuperar más fondos financieros de los invertidos, con lo que podría ser un buen negocio, hasta tal vez mejor que el petrolero.

Empero, lo que puede anotarse es que era mejor destinar los recursos invertidos en ese edificio a la exploración, tanto en los campos donde actualmente se producen los hidrocarburos, como en la búsqueda de otros más. De manera de asegurar su propia estabilidad, pero fundamentalmente para aportar ingresos al Estado, de los que éste siempre necesita, para cumplir con oportunidad y eficiencia otros planes oficiales, tanto en el mismo sector como para desarrollar nuevas actividades productivas del país.

Cuando era reportero de prensa, más de una vez se me asignó cubrir las actividades de YPFB. En esos tiempos ocupaba unos dos a tres pisos en el edificio que dispone el Ministerio de Economía, en la esquina de la Av. Camacho y calle Bueno. Y fue cuando se le dio bastante impulso, en particular cuando era su presidente el hermano del entonces presidente de la República Víctor Paz Estenssoro, de nombre José.

En la gestión de éste se tuvo el acierto de inspeccionar todos los campos que tenía YPFB en el país. Ello permitió planificar de manera más efectiva la actividad de la empresa. Esto pude constatar, porque los tres o cuatro periodistas que cubríamos sus actividades fuimos invitados a integrar la comisión. Por tanto, pudimos informar al país hasta del más mínimo detalle de lo que se hacía o no en Yacimientos.

A menos que YPFB tenga planeado retomar la producción y comercialización de los hidrocarburos, el nuevo edificio de El Prado podría ser utilizado y vender el que actualmente se ocupa en la calle Bueno. Así se daría nuevo impulso a Yacimientos, para que vuelva a ser productora y comercializadora de hidrocarburos y rescindir los contratos con las empresas privadas que al presente están a cargo de estas funciones.

De esa manera, YPFB volvería a ser productora y administradora de los hidrocarburos, esta vez en particular del gas, y así dejar de compartir con empresas privadas los ingresos que se percibe por la explotación y producción de tan importante riqueza que tiene el país.