La Unidad de Homicidios de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) levantó ayer el cadáver de un hombre que flotaba desde hace ocho días en la represa de Incachaca, el reservorio de agua para el suministro de la zona Sur y laderas de la ciudad de La Paz.
De acuerdo con informes iniciales se presume que el hombre se hubiera perdido, en el área se encontró huellas plantares. La primera hipótesis refiere que esta persona hubiera querido lavarse o tomar agua pero hubiera caído sin lograr reacción alguna, según explicó el jefe de Homicidios de la Felcc, capitán René Tambo.
Según el ingeniero ambientalista Gonzalo Lima, por este y otros casos, asegura que el agua que consumen los habitantes de las ciudades de La Paz y El Alto es de “mala calidad”, por la falta de control en represas y ante la evidente necesidad de renovación de las redes de distribución que no es atendida por autoridades y por la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas).