Los beneficios sociales de los deportistas profesionales

La semana pasada marcó noticia la demanda laboral por BENEFICIOS SOCIALES interpuesta por el ahora entrenador y ex futbolista Carlos Aragonés ante la autoridad jurisdiccional llamada por Ley, quién luego de haber sido contratado por el anterior directorio de la Federación Boliviana de Fútbol, fue exonerado intempestivamente por el actual ejecutivo César Salinas luego de once meses de trabajo por una cuantía de Bs 330.000.00, producto de un salario mensual de $us 4.000.00 mensuales. Según las declaraciones del entrenador Aragonés, el actual presidente sin justificativo alguno y con el afán de contar con “gente de su confianza ” en el directorio, simplemente le agradeció sus servicios prestados resolviendo el contrato de trabajo unilateralmente sin haber acordado amigablemente el finiquito por sus derechos laborales que le correspondían. Toda esta situación se debe a la inexperiencia del actual presidente de la FBF en la administración de su personal, que cualquiera que sea el rótulo o título del contrato, ya no se puede disfrazar con que el mismo se encuentra en al ámbito civil y no laboral, y no teniendo los recursos para honrar los beneficios al personal que se despide naturalmente le seguirán las demandas que la Ley los ampara. Recordemos que los deportistas profesionales de todo deporte incluído el cuerpo técnico, se encuentran amparados por la Ley General del Trabajo y el D.S. 23570 de 26 de julio de 1993, que cubre los vacíos de esta Ley y su Reglamento, con los requisitos que se requieren para establecer la relación empleador-trabajador, vale decir, dependencia laboral, percepción de salario y trabajo por cuenta ajena, Decreto que se ha constituido en un instrumento legal para fundamentar una demanda laboral como para dictar Sentencias, Autos de Vista y Autos Supremos, no solamente del deportista profesional sino de todos los trabajadores del país en litigio. Estos problemas que tiene y tendrá la FBF, se debe primordialmente a la falta de un Reglamento del Estatuto impuesto por la FIFA y la CONMEBOL sin criterio alguno, en el que el único que tiene funciones es el Presidente y no así los cuatro directores que deambulan sin saber qué hacer, habiendo creado estas instituciones UN MONARCA que ambas los tuvieron y como consecuencia, las rejas de una prisión fueron su destino final. Lastimosamente hasta la fecha no se ve en absoluto el trabajo de la FBF por la ineptitud de los “asesores” que aparecen y que no conocen la realidad y las necesidades de cambio que requiere nuestro fútbol muchas veces señaladas en esta columna y como están las cosas, las demandas laborales seguirán llegando cuando los citados trabajadores sean despedidos pese a no haber satisfecho su trabajo, que precisamente no es el caso de Carlos Aragonés, quién trabajo según lo manifestó, con la reglamentación de licencias que avalen el profesionalismo de los clubes exigida por la FIFA y la CONMEBOL. Es una pena que hasta la fecha no tengamos un motivo para felicitar a la FBF y el tiempo va pasando y como están las cosas, empezaremos un nuevo año con las mismas falencias que han colocado a nuestro fútbol en el sótano del contexto suramericano.

Dr. Edgar Linares Mariscal,

fundador y ex asesor legal de Fabol