Despedida a difuntos

Muchas familias, que aún rescatan nuestras costumbres y las tradiciones ancestrales, hoy despedirán a sus almas con rezos, cánticos y música interpretada con instrumentos nativos como el pinkillo y la tarka, para lo cual llegarán hasta el cementerio donde se encuentran los familiares fallecidos.

Tal como recibieron al mediodía del jueves 1 de noviembre, de la misma manera hoy se despedirán a la misma hora, también como una muestra de agradecimiento de haber compartido, durante 24 horas con los espíritus de sus seres queridos que partieron de este mundo terrenal, para lo cual las mesas serán recogidas y luego trasladarse en muchos de los casos hasta el camposanto donde se encuentra en cuerpo del difunto.

Hoy viernes los cementerios de la ciudad de El Alto serán abarrotados de los familiares que llegarán hasta los tres camposantos municipales como son el Cementerio de La Guerra del Gas Sur, de Santiago I, cementerio de Villa Ingenio del Distrito 13 y el cementerio Mercedario del Distrito 4, donde con una muestra de cariño y agradecimiento por haberles permitido compartir durante las 24 horas en sus domicilios, mediante una mesa, serán despedidas, de la misma forma como llegaron.

Mucha comida, fruta y otros alimentos que caracteriza esta despedida serán expuestas en la tumba del ser querido que hace algunos años atrás falleció y que en esta oportunidad, como todos los años en estas fechas de Todos Santos lo recuerdan con este tipo de actividades.

Con el deber cumplido, muchos familiares luego de hacer rezar todo lo que un día antes pusieron en la mesa de sus difuntos, este día denominado “despacho”, luego de terminar de hacer rezar, suelen retirarse a otro lugar para continuar compartiendo entre los parientes.

En muchos casos esta despedida se hace retirándose de la tumba del ser querido bailando al son de una pinkillada o una tarkeada, música autóctona característica para estas fechas de Todos Santos.

Esta despedida a los difuntos es hasta después de un año, cuando en la próxima gestión de la misma manera lleguen las almas en el día de los difuntos, el 1 de noviembre, pero a pesar de que es solo el espíritu es el que se hace presente y que no es visto por sus familiares, la tristeza queda, luego de que con el corazón y el pensamiento se compartió con sus seres queridos durante estos días de Todos Santos, entre tanto solo quedará, durante todo este tiempo, la visita a sus tumbas llevando flores como muestra de que no se olvida a los seres queridos.