Fiebre de corredores interoceánicos

PUERTO ALMIRANTE MIGUEL GRAU Y FERROCARRIL TACNA LA PAZ

Entre los proyectos portuarios, de Perú, está la construcción del Puerto Almirante Miguel Grau, a 67 Km de Ilo, que mediante Ley 28.865, del año 2006, declara de necesidad pública y de preferente interés nacional; además de la construcción de un ferrocarril de Tacna hasta la frontera con Bolivia y la terminación de la carretera Tacna - La Paz. Perú, recientemente, ofreció efectuar ampliaciones en el puerto de Ilo y establecer rebajas del 30%, en las tarifas portuarias, para la carga boliviana, además de otras ventajas para el transporte de cabotaje entre El Callao e Ilo.

CORREDOR SANTOS ANTOFAGASTA MEJILLONES

A toda esta fiebre de corredores se ha unido, el 21 de diciembre de 2015, el corredor vial de 2.754 Km, que une Santos – San Pablo - Campo Grande - Mariscal Estigarribia – Tartagal – Jama – San pedro de Atacama – Calama – Antofagasta y Mejillones, en el norte de Chile. Brasil, Paraguay, Argentina y Chile firmaron el convenio, para su desarrollo.

“Esta es una ruta que no requiere de grandes obras de ingeniería, como pueden ser túneles u otros, por lo que avanza bastante rápido. Una expectativa razonable es que este corredor bioceánico estará operativo dentro de los tres años, y si nos aplicamos, podría ser antes”, anticipó un diplomático al diario El Mercurio de Antofagasta, región que se beneficiaría con el proyecto.

El corredor vial proyectado tendría 1.814 Km entre el Campo Grande -capital del Mato Groso do Sul- y Antofagasta, en el norte de Chile, fronteriza con Bolivia (la distancia actual, pasando por Asunción, es de 2.580 Km). Hay un marcado interés de la Moneda para potenciar sus puertos.

CONCLUSIONES

• No habrá carga alguna entre Santos u otro puerto de Brasil que cruce Bolivia para llegar a un puerto del Pacífico y viceversa, para continuar el transporte vía marítima, en forma competitiva.

• El “Estudio de Ingeniería y Viabilidad Técnica y Económica de las Condiciones de Navegación de la Hidrovía Paraguay - Paraná” indica, con base en un análisis de costos por modo de transporte y asignaciones modales de carga con proyecciones, según corredores y productos, que no circularía, al Pacífico, ninguna carga procedente del área de influencia de la Hidrovía, que comprende varios estados de Brasil, limítrofes con Bolivia (Brasil actualmente tiene muchos proyectos portuarios en el Atlántico y en sus ríos).

• El hierro del Mutún solamente podrá salir por la Hidrovía Paraguay - Paraná, ya que el precio internacional actual es de $us 65.00/ton. Por otra vía, como por el proyectado FFCC, el costo de transporte sería mayor al valor del producto, en el mercado internacional. (La empresa Vale, exportadora de hierro a la China, de Brasil, recientemente tuvo una pérdida de aproximadamente 12 mil millones de dólares, por las bajas de los precios).

• Ni Argentina, Paraguay y menos Uruguay utilizarían este ferrocarril porque tienen mejores opciones para salir al Pacífico como, entre muchas, Jama y Sico (fronteras Chile – Argentina) para llegar a Antofagasta.

• En Bolivia, en lugar de hablar de corredores bioceánicos, debemos hablar de corredores de integración y de exportación. Los emprendimientos de la interconexión ferroviaria Santa Cruz - Cochabamba, la construcción del ferrocarril Motacucito-Mutún-Puerto Bush, la construcción de Puerto Busch, el mejoramiento de la navegación de la Hidrovía Paraguay Paraná, (comprometido entre los países de la Cuenca del Plata), la reconstrucción del ferrocarril Cochabamba Oruro, son proyectos que se debe tomar en cuenta. Estos proyectos concluidos y los ferrocarriles y carreteras al Pacífico existentes son suficientes para atender nuestro comercio exterior a muy largo plazo, y no debe preocuparnos el transporte de cargas ajenas, por territorio boliviano, cuyos beneficios no se conoce; por el contrario, podrían tener efectos negativos en el medio ambiente.

• Es de resaltar y reiterar que Bolivia tiene legítimos derechos sobre los puertos chilenos, antes bolivianos y peruanos y Chile tiene obligaciones, entre ellas la de otorgar el “más libre tránsito” por su territorio. Bolivia JAMÁS debe renunciar a ese derecho.

El autor es Ing. Civil, docente de la UMSA y autor de varios estudios de transporte internacional.