Los Millonarios quedaron concentrados en el predio de Cardales a la espera de la gran final

River Plate cumplió ayer con el ritual de aislarse en el predio Cardales, distante 57 kilómetros de su estadio Monumental, donde el sábado definirá la 58º edición de la Copa Libertadores ante su clásico rival, Boca Juniors.

En una tradición que el técnico Marcelo Gallardo realiza en la antesala de los partidos cruciales, toda la plantilla ‘millonaria’ se mudó a este predio de Cardales donde esta tarde realizó su primera práctica.

Todavía sin definir el once titular, el entrenador ensayó dos variantes para reemplazar al sancionado colombiano Rafael Borré y luego de descartar por lesión a Ignacio Scocco.