Crisis en el Seguro Militar

En ciertos casos, que se dice marchan bien, como si fuera una entidad única e intocable, suceden problemas donde sus directivos van debatiendo sobre cómo poder sobrevivir, porque las obligaciones crecen y suman, sin encontrar salida. Quienes la dirigen están enfrascados en otras ideas, que no condicen con las necesidades económicas, para lograr salir del gran entuerto en que se encuentran, por no saber defender los intereses de sus afiliados, que pudo ser un ejemplo de Superestado económico, pero su conformación estructural está sometida a la superioridad y más allá el servilismo. Esto nunca les permitió llegar al objetivo para la que fue creada la entidad, además del sometimiento y el desconocimiento de los más elementales principios económicos.

Concretamente me refiero a la Corporación del Seguro Social Militar, en la que la Junta Superior de Decisiones, con aproximadamente 12 miembros, por distribución parietaria de cada una de las fuerzas, además de jubilados y viudas, que generalmente tratan problemas de rutina en sus reuniones y no pensar en salvar su entidad aseguradora, porque en ello se juega su futuro.

Todos quienes tutelan tienen que darse cuenta que la profesión militar es muy hermosa, sacrificada, además de ingrata, porque se llega a los 35 años de servicio, a una edad en que el individuo puede producir mucho, y la profesión se acaba, considero jubilación temprana, es la única profesión además de la policial que se termina.

En especial tratando el tema del seguro militar, éste tiene un decreto ley ambicioso al que, infelizmente, no se le ha sabido dar valor real y actualmente tropieza con graves inconvenientes para dar curso a alguno de sus regímenes, que, dicho sea de paso, está coadyuvado por la falta de conciencia de los jubilados de SIP, quienes deberían ser solidarios con un beneficio que recaerá en la familia. Pero rechazan un aporte que los jubilados del Senasir hacen por bastante tiempo. ¿Cuál podría ser el resultado?, que los primeros reclamen la aplicación del artículo 152º del Decreto Ley Nº 11.901 que se refiere al pago de 30 rentas ante el fallecimiento del titular, conociendo que los recursos que ingresan actualmente no alcanzan ni para el 50% del monto original.

Ahora bien, muchas veces se les presentó, por este medio, ideas que pueden ser llevadas a la realidad y dar una solución definitiva al problema, sin gravar mayores aportes a los jubilados, quienes tienen esa preocupación. Y es ahí que podemos decir que no solo hay representantes a niveles altos, los mismos que no encuentran solución, porque solución no es reducir el monto, no es devolver aportes (sería más delicado que pagar el total) y además que las Uniones de Militares del Servicio Pasivo, Asociación de Suboficiales u otros no tienen salida ante la demanda de reclamos y presiones. La pasividad y la falta de ideas técnicas solo podrían llevar a la entidad aseguradora a una crisis de graves consecuencias y todos los niveles ejecutivos pasarán nuevamente por la entidad sin pena ni gloria y por qué no decirlo, podría ser más con pena.

Es bueno recordar que desde un principio, cuando algunos técnicos observaron la Ley de Capitalización Individual, sensiblemente nadie reaccionó en forma lógica y coherente para defender su institución. Les fueron impuestos aportes que no deberían ser, así como no faltaron quienes apoyaron esas medidas, desconociendo cómo funcionaba Cossmil, por lo cual el sistema actualmente es censurado por propios y ajenos, porque la discriminación de niveles en rentas existe, mientras que los abonos por cesantía y especiales podrían haber tenido continuidad y curso normal sin observaciones, como una entidad tipo e integral y modelo de seguridad social. Mientras que a la fecha está en la mira de la salud universal, que forzosamente recaerá en el tercer nivel a todos los seguros actuales y uno de los más sensibles para cumplir las órdenes del Capitán General, es el Seguro Social Militar.

Este es un momento crucial para todos los entes gestores de salud, nadie es intocable cuando se trata de mantener una posición por intereses personales, por lo tanto es importante que piensen en cómo volver a un sistema integral, sin que nadie pueda censurar la marcha de la entidad, conociendo que además en ningún país del sector americano sus FFAA fueron tocadas.