El equipo merengue se impuso con lo justo al Huesca y con gol de Bale, un día antes había goleado el Barcelona al Espanyol y sigue puntero.
El Real Madrid jugó con fuego en El Alcoraz, salió airoso y con los tres puntos para prolongar el pulso por el liderato de LaLiga Santander que fortaleció el Barcelona el sábado.
No mejora el juego del conjunto blanco. La estancia de Santiago Hernán Solari en el banquillo no ha enriquecido su fútbol. Pero ha aliviado sus guarismos. Nueve partidos, ocho victorias y la única derrota en Ipurúa, contra el Eibar. Dos puntos le separan del Sevilla y Atlético Madrid y cinco del Barcelona.
Está vivo el Real Madrid a pesar de haber marcado uno de los peores inicios de su historia en un curso que se aproxima a su ecuador con la recuperación del Valladolid, que salió con los tres puntos de Anoteta, la escalada del Betis, que frenó al Rayo Vallecano y que contempló, sobre todo, uno de los encuentros más vistosos de lo que va de competición en Eibar, donde el conjunto de Jose Luis Mendilibar y el Levante empataron a cuatro.
El Real Madrid se llevó los tres puntos de El Alcoraz frente un rival que acumuló méritos para sumar algo. No pareció el colista el Huesca, que encajonó a su rival durante muchos minutos. El equipo de Solari vivió de las rentas del tempranero gol de Gareth Bale y de la brillantez de Thibaut Courtois, el mejor del partido.
El combinado blanco, presionado por las victorias del sábado del Barcelona, Atlético y Sevilla, mantuvo el tipo. Nada que ver con la dejadez que dejó entrever en Ipurúa. Sin embargo, el juego fue pobre, sin ambición para procurar el cierre del partido.
El coraje y la entrega expuesta por el Huesca no tuvo premio. Anclado en el pozo de la tabla lleva catorce encuentros sin ganar. Apunta a Segunda, de donde llegó junto el Valladolid, que dio en San Sebastián un nuevo golpe de mano a sus aspiraciones.
El conjunto de Sergio González, una de las buenas noticias del arranque de la temporada pero venido a menos en el último mes, aprovechó los errores de la Real para reencontrarse con el triunfo (1-2).
El Betis prolongó la escalada en la tabla. Aprovechó el conjunto de Quique Setién los dos partidos seguidos como local para sumar seis puntos. Hace una jornada, contra la Real Sociedad. En esta ocasión, a costa del Rayo (2-0), al que devuelve a su realidad después de que ganara al Eibar hace siete días.
El domingo arrancó con uno de los partidos más espectaculares de la temporada. Ipurúa disfrutó de un canto al fútbol. Ocho goles y una lucha sin cuartel que no tuvo vencedores ni vencidos (4-4).
Fue un duelo trepidante entre el Eibar y el Levante, que tuvo el partido encarrilado, también perdido y que salvó en la última acción, con el gol de Borja Mayoral.
EFE
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