San José puede dar la vuelta olímpica el domingo

San José está cerca de consagrarse campeón del torneo Clausura. El 16 de diciembre podría ser una fecha histórica para el club orureño, de ganar a Blooming, en Santa Cruz, y darse un par de resultados se coronaría ganador del semestre.

El técnico de San José, Eduardo Villegas, prefiere ir partido tras partido y no adelantarse en un posible festejo en tierras cruceñas. “Vamos paso a paso, no nos adelantamos a nada, pero estamos muy sólidos, eso es importante. Buscamos ser campeones, pero seguiremos trabajando en busca de los resultados”, dijo Villegas.

A dos fechas del final, San José tiene 49 unidades, una ventaja de tres puntos con relación a Royal Pari (46) que ganó a Real Potosí por 1-2, en una complicada visita que tuvo el equipo que dirige Roberto Mosquera. Los dos clubes con mayor chance de salir campeón jugarán en el departamento de Santa Cruz.

San José debe ganar a Blooming y Royal Pari debe perder ante Oriente Petrolero para que el próximo domingo el fútbol boliviano tenga un nuevo campeón.

Más atrás están los dos clubes paceños. The Strongest y Bolívar tienen 44 unidades, ambos salieron ganadores de la fecha 24, al golear a Sport Boys (6-0) y Destroyers (0-2), respectivamente.

La única opción que tienen el Tigre y la Academia para mantener el sueño de obtener el título es que San José no gane y ambos logren victorias sobre Nacional Potosí y Real Potosí, respectivamente.

“Se llevará la Copa a Santa Cruz y toda la logística por si San José sale campeón”, dijo Adrián Monje, director de Competiciones de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF).

Wilstermann que se ubica en el quinto lugar, con 43 unidades, también mantiene el sueño del bicampeonato. El actual campeón del fútbol boliviano no se resigna a no ganar nada en este semestre, pero deberá ganar a Sport Boys, en la localidad de Warnes y esperar la derrota del líder.

Los 14 clubes de la División Profesional del Fútbol Boliviano demostraron que hay irregularidad, quizás por la geografía de nuestro país, un fin de semana juegas en el Oriente, con casi 40 grados de temperatura y luego lo haces en una ciudad de altura a más de 3.000 metros del nivel del mar. Es complicado para los clubes que no tiene buena logística, a pesar de eso, hay un torneo emocionante.

Paulo Apaza