Augusto J. Russo Sandoval
Un estudio presentado por la BBC en 2015 establecía que entre los países con más consumo de bebidas alcohólicas en América Latina estaba Chile, con un consumo anual per cápita de 9,6 litros, Argentina con 9,3 y Venezuela con 8,9 litros. Luego están Paraguay (8,8 litros), Brasil (8,7), Perú (8,1), Panamá (8), Uruguay (7,6), Ecuador (7,2), México (7,2), República Dominicana (6,9), Colombia (6,2), Bolivia (5,9), Costa Rica (5,4), Cuba (5,2), Nicaragua (5), Honduras (4), Guatemala (3,8) y El Salvador (3,2).
En 2015 Bolivia ocupaba el puesto 12, entre los países de más consumo de bebidas alcohólicas, pero debido a la mayor apertura de fronteras y el contrabando, podríamos decir que el consumo de bebidas alcohólicas no solo aumentó, sino que se redujo la edad de los consumidores, según registros de Munasin Kullakita, organización que trabaja con menores en condición de calle en las dos ciudades del departamento de La Paz.
Los centros de salud a donde suelen ser remitidas las personas por intoxicación alcohólica, conocen que quienes llegan a ser afectados por esta problemática en la actualidad tienen desde 13 – 15 años y llegan a más de los 60 años. Pero este grupo no solo consume bebidas alcohólicas, sino otra sustancia que afecta directamente al cerebro, como es la clefa.
Para la investigación de la BBC el consumo de bebidas alcohólicas en Latinoamérica se convierte en un problema de salud pública en la región.
El alcohol llega a todas partes, porque la cadena de distribución es amplia, hay más establecimientos que ofertan bebidas alcohólicas sin control en barrios. También se elude trámites municipales, porque tanto tiendas de barrio como licorerías o agencias de distribución de cerveza se instalan cerca de establecimientos escolares, hospitales, pese a las restricciones de la Ley 259, Ley de Control al Expendio y Consumo de Bebidas Alcohólicas.
A nivel internacional se establece que en la industria, la cerveza es la bebida alcohólica más popular, al representar el 55% del total del alcohol consumido. Después están licores como vodka o whisky con más de un 30% y casi un 12% el vino. Pero en Bolivia los licores adulterados son vendidos en botellas Pet, siendo los de más alto consumo entre poblaciones jóvenes que se encuentran en edad productiva y que terminan con grados de intoxicación alcohólica.
Según registros se identifica que 7.031 personas fueron arrestadas por diferentes instancias, como resultado de haber sido denunciadas por el consumo de bebidas alcohólicas en vía pública. De esta cantidad, el departamento de La Paz se ubica en primer lugar con 3.853 denuncias, seguido de Santa Cruz con 1.437 casos y entre los demás departamentos se identifica 1.741 casos, a pesar de que muchos ciudadanos evitan hacer denuncias. Así el consumo de bebidas alcohólicas sea de grupos instalados cerca a domicilios, los vecinos temen ser agredidos por los consumidores en vía pública, que por lo general suelen responder violentamente.
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