Obras unen rock y arte en Cinemateca

Inaugurando los ciclos especiales para 2019, la Cinemateca Boliviana programó en enero el evento denominado Cinemateca en Concierto con la proyección de obras que unen al rock con el séptimo arte. En el primer viernes del año (4 de enero), en función de las 19.30 horas. La propuesta en cartelera es The Wall de Pink Floyd.

Luego del renacimiento del rock en 2018 y el tributo cinematográfico Bohemian Rhapsody, el público amante de la música, el cine ahora tendrá la oportunidad de disfrutar de documentales, biopics y filmes interpretados por los máximos exponentes de la música contemporánea.

Para este 4 de enero, la Cinemateca Boliviana proyectará a las 19.30 el filme de Alan Parker The Wall, basado en la obra maestra del grupo británico de Rock Progresivo que se presentó en 1979 en un formato de disco doble conceptual que marcó uno de los puntos más altos en la creatividad del entonces líder de la banda, Roger Waters.

El filme narra la historia de Pinky, interpretado por Bob Geldof, una estrella de rock que vive encerrada en sus recuerdos y traumas de niñez y adolescencia tratando de romper el muro que él mismo se fue armando a lo largo de su existencia.

La película estrenada en 1982 va a la par del disco con un par de variantes. Las presentaciones que ofreció la banda británica también escenificaron el concepto del muro, construyendo una pared gigante mientras avanzan las canciones, que al final del concierto es derrumbada ante la sorpresa y euforia del público.

Junto a la dirección de Alan Parker destacan los dibujos surrealistas de Gerald Scarfe, quien creó a personajes emblemáticos para toda la obra de Pink Floyd como El Profesor, El Juez, la Madre o la “novia mantis” que martirizan al protagonista.

Como dato curioso, el filme incluye una canción nueva, que no se grabó en el disco doble de 1979, añade una versión alterna, pero también elimina dos canciones en el metraje final.

When the Tigers Broke Free se escucha dos veces en la introducción al argumento, también se añade What Shall We Do Now? como versión alterna de Empty Spaces, mientras Hey You y The Show Must Go On quedaron fuera, la primera porque Roger Waters la vio muy repetitiva, al ser una toma que recopila varias escenas anteriores.

El director recuerda que durante el estreno de la película en el festival de Cannes, a medianoche, se instalaron dos camiones con equipos de sonido para resaltar el audio del filme en el teatro Palais que ya tenía todos los años encima. El sonido era tan fuerte que la pintura de las viejas paredes se fue desprendiendo y cayendo sobre los espectadores como copos de nieve.

La película es valorada por su estilo narrativo único, manejo de imagen y es estudiada tanto por la psicología como por las ciencias de comunicación que tratan de descifrar todo su significado. (Visor Bolivia)