El Dakar estuvo de descanso y el piloto boliviano, ahora sí, va por más tras superar un duro trance.
Daniel Nosiglia ya está repuesto del shock que significó para él ver a su hermano Walter Junior inconciente y postrado en el suelo, tras un grave accidente en la tercera etapa del Dakar, motivo por el que su padre y hermano abandonaron el rally más duro del mundo.
Aprovechó muy bien el día de descanso para recargar las pilas en Arequipa, donde ya está con su padre, quien decidió acompañarlo en la segunda parte del Dakar 2019 que se ha tornado bastante duro y complicado en su desarrollo en Perú.
“Era una etapa maratón, toda la asistencia la hacíamos nosotros, salí motivado. Primer día que disfruto del Dakar, estamos listos para dar todo”, dijo Daniel Nosiglia, tras la quinta etapa del pasado viernes, con bastante optimismo.
“No hubo complicaciones, paré en la caída de Goncalves, se hizo una buena etapa y la disfrutamos”, dijo Nosiglia hijo al departamento de prensa que lo acompaña.
El semblante del hijo del “Lobo del desierto” está mejor, se nota que ya el mal momento pasó, ahora viene lo mejor para el nacional. “No tuvimos muchas dunas, arena, ha sido más que nada paso de dunas. Ahora viene la segunda parte tendremos algo de eso, estoy contento, cada día más confiado en la moto”, dijo a su departamento de prensa.
En cuanto a waltico, su hermano, se mostró esperanzado: “gracias a Dios todo bien, dándome los ánimos desde allá, eso me reconforta bastante”.
Daniel Nosiglia expresó su agradecimiento con la afición nacional que tanto le da su respaldo.
“Quiero mandarles un saludo grande, agradecer los mensajes que me dan, estos días han sido muy difíciles, he sentido el apoyo de la gente, todos los mensajes que he recibido han hecho que me vuelva a parar y siempre enfocado en dar todo por Bolivia”, afirmó con una sonrisa.
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