Ha salido recientemente a luz una valiosa compilación de remembranzas de un grupo que participó de manera activa en la conformación del MIR, como dice el título del libro: TESTIMONIO Y LEGADO - El MIR Histórico en la recuperación y construcción de la democracia contemporánea 1964-1984, trabajo efectuado por Alfonso Camacho Peña, Freddy Camacho Calizaya y Hans Moller Schroeter - Impresión Digital S.R.L., primera Edición 2018.
La compilación se realizó mediante 11 talleres de trabajo en los cuales participaron: Alfonso Ferrufino, Alfredo Maldonado, Alfonso Vía, Carlos Derpic, Alfonso Alem, Carmen Rosa Rojas, Cesar Virguem, Diego Laneuville, Erwin Saucedo, Fernando Gonzales Quintanilla, Franz Barrios Villegas, Genoveva Ballester, José Puertolas, Luis Fernández Fagalde, Luis Mérica, María Eugenia Balderrama, Miguel Zalles, Tonchi Marinkovic y Orlando Taja. Participó también el CEN mirista, Oscar Eid Franco, Antonio Araníbar Quiroga, Jaime Paz Zamora y Walter Delgadillo Terceros, quienes aportaron con una actitud crítica y positiva a lo largo del trabajo.
El texto de 720 páginas, como bien lo expresa su introducción, “es el testimonio de una generación que nació a la vida política en plena crisis del proceso de la revolución nacional de 1952 a la cual las fuerzas conservadoras y sus aliados externos hacían decidido darle una respuesta autoritaria”.
Recorriendo sus páginas, uno se encuentra con la transición que surge del tutelaje de la Iglesia católica que, en su versión anticomunista del tiempo de la guerra fría, inició una rebelión ideológica y política transitando por el puente de las reformas del Vaticano Segundo, la Teología de la Liberación, la revolución en Libertad de la Democracia Cristiana (PDC) chilena y la revolución cubana, que converge en Bolivia en lo que se denominó el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria.
Bajo esa corriente ideológica, surgen numerosos nombres que en la actualidad se van perdiendo, pero que en su momento fueron extraordinarias figuras que reorientaron el curso de la Historia Nacional.
La muerte accidental del Gral. Gualberto Villarroel, el 27 de abril de 1969, creó la incertidumbre de quién sería el sucesor, pero el asunto se resuelve por la vía constitucional al asumir la presidencia el Dr. Hernán Siles Zuazo. En esta etapa surge un proceso de ruptura al interior del PDC, liderado en esa etapa por Luis Ossio Sanjinés. En esta fase surge el planteamiento de los jóvenes liderados por Adalberto Kuajara, para llevar adelante la lucha armada y la revolución socialista.
Entre 1970 y 1975 se da una fuerte acción de los jóvenes estudiantes de las universidades de La Paz, Oruro, Potosí y luego Santa Cruz, que planteaban un fuerte sesgo antimperialista y contra las fuerzas conservadoras del país.
En este periodo surgen los nombres de René Zavaleta Mercado, de línea izquierdista, con ideas favorables al PDCR, otro nombre destacado es Jorge “Chichi” Ríos Dalenz, que propicia una línea independiente para el PDCR, bajo una línea marxista. En Cochabamba destacan Jorge Derpic, Nicanor Bravo, Agustín Pérez, José Ortusta, Salvador Dueri, José Armijo, Mario Mendívil y Enrique Duarte.
Todos estos movimientos terminan convirtiendo al PDCR en MIR, que libró duras batallas para derrotar a los militares.
Esas luchas dieron lugar a gobiernos civiles, enviando a los militares a sus cuarteles, hasta llegar a la caída de estos para ser tomados el 2005 por un gobierno de un predominio indigenista que gradualmente deviene en una especie de neomonarquía, que a su vez busca eternizarse en poder. ¡IRONÍAS DE LA HISTORIA Y DE LA VIDA DE LAS NACIONES!
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