Una preocupación que angustia a buena parte de la población la expresó el ex-presidente del Banco Central, Dr. Juan Antonio Morales, cuyos méritos profesionales son muy conocidos, inclusive en organismos internacionales y cuenta con mucha experiencia en el campo de la economía. Él advirtió que “la estrategia del gobierno de cubrir el déficit fiscal con préstamos del exterior es peligroso para la economía del país, porque la deuda crece y podría resultar muy difícil pagarla”.
Consciente de la realidad política y económica por la que atravesamos, dijo: “Aplicar estas medidas solo para mostrar que tenemos la tasa de crecimiento más alta me parece que, por lo menos, es imprudente”. Consideró, además, “que el gobierno debería tener hacia el país una actitud más transparente y realista, y manejar la economía en función a la disminución de los ingresos que se ha registrado en los últimos años. Considera que la economía no es un concurso de belleza para demostrar a como dé lugar lo bien que estamos en relación con otros países”.
Sugirió que el gobierno tiene que “postergar la ejecución de proyectos de inversión que no se justifican y que no tienen estudios que los respalden”. La opinión es clara y así deberían entender las autoridades económicas que parecen estar empeñadas en utilizar la peregrina frase de que “la economía está blindada”. Los años de auge financiero y mucho más los de crisis por la que atravesamos, han mostrado que no existe la fortaleza que solo se la pregona por razones demagógicas y populistas para conseguir apoyo a una nueva reelección.
Evidentemente, el país no puede manejarse bajo la regla de “ser ricos con dinero procedente de préstamos”, cuando la verdad muestra claramente que la riqueza solamente es posible mediante las inversiones que sean rentables, que provean empleo, que sean sólidas y debidamente consolidadas en los campos de la producción y las exportaciones. No se puede decir que “somos ricos cuando abultamos los bolsillos con lo que nos prestaron y cuando, simplemente, la sensación de ser ricos” cuando todo se debe y, además, será preciso pagar intereses que abultaron lo adeudado.
Creer que el crecimiento se logra con endeudamiento y déficits es contrario a la moral y a la realidad porque el crecimiento solo es posible mediante la producción y comercialización de lo producido y, en lo posible, de los réditos que den las exportaciones. Crecimiento significa crear riqueza que garantice las operaciones financieras, creen empleo y den posibilidad para diversificar la economía; lo demás es simple utopía y demagogia que el pueblo ya no cree, porque se da cuenta de las condiciones de pobreza en que vive y que espera mayor responsabilidad y efectividad gubernamental para lograr el desarrollo y luego el crecimiento.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |