Prohíben entierros en cementerio “La Llamita”

A partir de febrero y durante ocho meses, el municipio de La Paz prohibirá la realización de entierros en el cementerio “La Llamita”; se prevé la construcción de pabellones, para lo cual se realizará un censo sobre la cantidad de personas enterradas en el camposanto clandestino.

El cementerio “La Llamita” se halla establecido desde la década de los 70. El camposanto considerado clandestino por no estar bajo tuición de la Municipalidad, a través de un acuerdo con los vecinos y juntas vecinales de los distritos 12 y 13, se decidió que desde febrero pase a la administración de la Alcaldía paceña.

El cementerio, ubicado en la avenida Juan José Torres de la zona Agua de la Vida, será modernizado con la construcción de, al menos, seis pabellones con el objetivo de cuidar la salud de la población y ampliar la capacidad de los entierros, según informó el director general ejecutivo de la Entidad Descentralizada de Cementerios de La Paz, Ariel Conitzer.

“Este es un proyecto añorado por varios años. Por mucho tiempo este espacio estaba funcionando ilegalmente, pero con la intervención municipal será como el Cementerio General”, dijo el subalcalde del macrodistrito Perifèrica, Oscar Mamani.

Se estima que en la ciudad de La Paz existen 15 mil difuntos, de los cuales el Cementerio General solo acoge a 5 mil, por lo que se decidió intervenir en los cementerios macrodistritales.

Conitzer adelantó que se realizará un relevamiento o censo en el lugar, para luego iniciar las respectivas exhumaciones, desde luego en coordinación con los familiares, que deberán acudir al área administrativa del Cementerio General para realizar el registro en planillas.

Se estima que ese cementerio alberga a 6.000 sepulturas superpuestas. Conitzer informó que para llevar adelante un proyecto de construcción de pabellones, se prohibirán los entierros por ocho meses y los requerimientos nuevos serán transferidos al Cementerio General.

La Alcaldía iniciará la construcción de los primeros seis cuarteles en julio para albergar a 1.200 fallecidos, además de accesos peatonales. La inversión en esta fase será de 4,5 millones de bolivianos.