Estados Unidos.- Debido a una extrema ola de frío, ayer la Oficina de Emergencias de Chicago exhortó a los residentes a almacenar comida y a guardar sus coches. El Servicio Meteorológico Nacional recomendó no viajar estos días. Las oficinas y los colegios están cerrados y casi no se ve gente por las calles de la tercera ciudad más poblada de EEUU, con 2,7 millones de habitantes.
A los que circulan se les identifica rápido por la estela de vaho que van dejando. No importa cuánto se cubran la cara: su respiración se congela una vez atraviesa las bufandas. Sin embargo, hay unos que ven el escenario como una oportunidad de entretenimiento.
“Estas condiciones suponen un riesgo para la salud pública y hay que tratarlas apropiadamente. Son temperaturas que entrañan una amenaza para la vida”, advirtió Rahm Emanuel, alcalde de Chicago. (Agencias)