Sobre Pachakutismo

Tenemos en nuestras manos el “Boletín del Pachakutismo”, de agosto de 1949, Año II, N° 10, publicado bajo la responsabilidad de Fernando Diez de Medina y Gonzalo Romero, en La Paz-Bolivia.

“Iré con orgullo a la cárcel, por haber defendido a Bolivia contra los millonarios defraudadores de impuestos. El pueblo me sacará de las rejas. Pero antes, proclamaré públicamente la Revolución Nacional, porque si en Bolivia no hay leyes, si los jueces se venden a Patiño, entonces debemos abandonar la lucha ideológica y coger los fusiles para acabar con los pícaros que están asfixiando a este país”.

Tales términos empleó el jefe del Pachakutismo, Fernando Diez de Medina, en una entrevista exclusiva publicada por “La Patria”, de Oruro, el 24 de julio de 1949. Ésta, por su importancia, fue incluida en las páginas centrales de dicho boletín.

“Hasta hoy he sido un insurgente dentro de la ley. Mas si la ley es ultrajada, si la justicia se alquila, entonces haré como el gran Linares: conspiraré sin miedo y sin descanso, hasta derrumbar al Superestado Minero”, agregó.

El “Pachakutismo”, además de esta nota intitulada “Si los Jueces se venden a Patiño proclamaré la Revolución Nacional”, ofrece otros temas como: “¡Estamos en la línea Pachakutica!”, “La fortuna real de Patiño”, “El fiscal Illanes requiere el sobreseimiento”, “Dos cartas históricas” y “Las defraudaciones de Patiño están probadas”.

Refleja el sentimiento nacionalista que se avivaba en una época marcada por los intereses del Superestado Minero, que saqueaba los recursos naturales no renovables, para provecho de minorías privilegiadas. Entre tanto la mayoría subsistía postergada de sus justas aspiraciones de un destino mejor.

El movimiento liderado por el escritor y político boliviano Fernando Diez de Medina propugnaba la recuperación de la riqueza nacional, a favor del Estado. Esta inquietud data de la década del 40 del Siglo XX.

Diez de Medina, conocido en las lides políticas como el “Pacha”, es uno de los escritores más prolíficos no sólo de Bolivia sino de América. Biógrafo, entre otras cosas, del connotado poeta y ensayista andino: Franz Tamayo.

Ha ocupado, asimismo, importantes cargos, en la administración pública. Nunca llegó a ser parlamentario.

En suma: el Pachakutismo aún tiene vigencia en nuestros días. Y queda mucho por recuperar.