Acoso escolar, ¿enemigo furtivo de la educación?

En el variopinto de problemáticas que se presentan en las Unidades Educativas, un tema recurrente es el bullying o acoso escolar, que llama la atención por su peso. Directores, profesores, padres de familia y los mismos estudiantes muchas veces no poseen conocimientos sólidos sobre la definición de acoso escolar; ni acerca de quiénes son los protagonistas, tipos de acoso escolar, acciones para prevención, detección oportuna, protocolo de actuación del bullying, medidas disciplinarias según las normas vigentes y oportuna derivación a otras instituciones. Además según datos, muchos de los padres con hijos que sufren bullying no lo saben.

El término bullying o acoso escolar se refiere a aquellos comportamientos llevados a cabo con la intención de someter a la víctima, implicando diferencias de poder y se dan de forma constante y mantenida en el tiempo, no explicándose como algo puntual o por un hecho en concreto entre pares.

Los tres protagonistas del acoso escolar son: el agresor, quien generalmente no agrede delante de los adultos, con tendencia de abuso de poder, deseo de intimidar y dominar; el agredido, muchas veces con bajo nivel de autoestima, puede ser tímido, inseguro, con carencia de asertividad, con tendencia a la sobreprotección de su familia, y los espectadores, que son cómplices estimulando con sus risas, siseos, con su silencio, observando sin intervenir y amplificando el acoso escolar.

Los tipos de acoso escolar son: a) el cíberbullying por medio de las nuevas tecnologías de la información y comunicación (NTICs) y las redes sociales (WhatsAap, Facebook, etc.) con mensajes nocivos o fotos manipuladas con intención de causar daño; b) el físico, con la agresión, con golpes y patadas; c) el material, quitándole sus útiles escolares o deteriorando los mismos, sin permiso del dueño; d) el psicológico, donde se lesiona la integridad emocional, como humillar; e) el social, más presente en las estudiantes por medio de la exclusión del grupo de pares en trabajos de estudio o actividades de danza, entre otros; f) el verbal, por medio de los insultos, la discriminación o dañar la reputación social.

Los medios de prevención del acoso escolar son: trabajo con la familia a través de la comunicación dialógica, como la concienciación sobre la problemática tangible, tanto dentro como fuera de la institución, como el buen clima de convivencia escolar y desarrollo socioafectivo de los estudiantes. También la familia debe tener una comunicación abierta con el estudiante, con modelos de comportamiento positivos, educando en valores de respeto, tolerancia y empatía, además de respetar las normas sociales de convivencia como de la institución.

La detección oportuna del bullying es importante, el estar alerta ante determinados síntomas que presente el estudiante, como: no querer a ir a la escuela, dolores de estómago o mareos, aumento de miedos e inseguridades, presentación de síntomas ansiosos y/o depresivos, disminución de la atención y concentración, reducción del rendimiento académico, dificultades para dormir y/o pesadillas recurrentes, no explicar lo que le pasa y encerrarse, aparición de golpes o moretones, pérdida de pertenencias, en algunos casos crónicamente, y el resultado fatal del suicidio.