Para este 2 de abril se tiene prevista una marcha de mandiles blancos, protagonizada por profesionales en Salud, en rechazo al proceder judicial con el nefrólogo del Hospital Obrero, y en demanda de mejores condiciones para paliar la actual crisis del sistema salubre, informó el secretario ejecutivo del Sindicato Médico y Ramas Afines (Sirmes), Fernando Romero.
Tras la conclusión del Comité Departamental de Salud (Codesa), se determinó reactivar las protestas del sector salud por los recientes atropellos cometidos contra profesionales de salud de la unidad de Nefrología del Hospital Obrero de la Caja Nacional de Salud (CNS) de la ciudad de La Paz.
“Denunciaremos la detención indebida e irregular de los nefrólogos y de otros colegas del interior del país, que hoy son víctimas de la persecución del Gobierno”, manifestó.
Crisis
En la movilización se denunciará la crisis por la que atraviesa actualmente el sistema público; la deuda del Gobierno de más de 100 millones de bolivianos que deja sin medicamentos e insumos a los hospitales públicos.
A decir del presidente del Colegio Médico de La Paz, Luis Larrea, la marcha de mandiles blancos tiene el firme objetivo de apoyar al paciente, que son perjudicados por la persecución política a médicos de la CNS.
Señaló que de acuerdo a los informes de centros de Salud de primer y segundo nivel y hospitales, aún no se palio las necesidades urgentes que necesitan para continuar prestando atenciones a los pacientes y desde la suscripción del convenio intergubernativo, no se dotó ni de equipamiento ni de ítems para el personal.
De la marcha de mandiles blancos, que se realizará el martes dos de abril en horas de la noche, participará la Federación de Sindicatos de Ramas Médicas en Salud Pública (Fesirmes).
El ejecutivo del sector, Luciano Valenzuela, señaló que el informe de la Autoridad de Supervisión de la Seguridad Social de Corto Plazo (Assus), que devela a más de ocho médicos involucrados en irregularidades en de dos dependencias de la CNS, es irresponsable.
Manifestó que la preocupación del Gobierno debería ser que los pacientes no sean perjudicados y continúen con la atención especializada. “No se puede dañar a la gente haciendo falsas acusaciones y dejar a enfermos sin atención”, agregó.
La Assus no tiene conocimiento del funcionamiento de la seguridad social y continuamente comete errores en acusar sin precisión, para emitir una acusación se debería contar con pruebas y respaldar la denuncia, añadió.
Lamentó que esa entidad del estado quiera desprestigiar a los profesionales y a la institución.
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