Producción de coca debe pagar impuestos

Con mucha razón, hay preocupación en el gobierno por captar mayores tributos, porque efectivamente las menores ventas de gas y las bajas cotizaciones impiden contar con la liquidez necesaria; corresponde entonces acudir al rubro de impuestos para contar con el dinero preciso para atender las necesidades de la administración del Estado. Al respecto, siempre existió la preocupación para que sean incorporados al mundo tributario los productores de coca; pero, extrañamente, siempre hubo evasión por quienes cultivan coca en diversos sitios del país y muy especialmente en el Chapare, Yungas, Ibirgarzama y otros sitios.

El pagar impuestos tiene que ser deber cumplido por toda actividad productiva y quienes se dedican al cultivo y cosecha de las hojas de coca deben tributar y no rehuir esa obligación. Hay también casos de renuentes a cumplir con este deber y debería ser la Renta la que adopte las medidas para que sean incorporados al mundo de tributantes; de otro modo, muchos lo hacen acogiéndose a diversas formas de pago, pero que les permite reducir los montos. Hay casos de comerciantes minoristas que pagaban impuestos y ahora, desde hace meses, señalan que no tributan porque “cuentan con disposiciones especiales para pagos en diferente forma”.

Es preciso, por otra parte, que no haya presión sobre quienes tributan normalmente; esas presiones perjudican gravemente a quienes tienen la intención de pagar, pero acogiéndose a planes que la Renta misma fije, mediante cuotas mensuales para los impuestos de larga data. Hay casos en que podría haber compensaciones con lo que adquiera el sector público; hay, igualmente, liberación de impuestos para algunos productos, como, por ejemplo, podría ser el de ciertos medicamentos; pero se ignora a muchos que podrían ser liberados porque se trata de medicinas de gran necesidad, especialmente cuando se refiere a tratamientos para el cáncer.

Hay liberaciones también para la importación de equipos especiales para el tratamiento del cáncer y otras enfermedades; esto, desde todo punto de vista, es medida excelente que permite al sector privado de medicina, como son las clínicas, importar equipos que ayuden a tratar enfermedades graves.

El que los cocaleros evadan el pago de impuestos es ilegal; ellos, si viven de las ventas de coca, tienen la obligación de pagar al Estado lo que las leyes establecen, rehuir esta obligación no es honesto y menos responsable. La coca legal no debe tener las restricciones que pudiese tener el narcotráfico que, por supuesto, no tributa y de hacerlo implicaría legalizarlo como actividad productiva. Lo cierto es que el narcotráfico debe ser combatido en toda forma, inclusive cuando realiza compras al mercado legal y libre de la venta de coca, que subrepticiamente adquieren los empresarios de las drogas.