Notre Dame en llamas

El fuego afectó ayer gran parte de la catedral de Notre Dame de París, uno de los monumentos más visitados del mundo.

Consternaron al mundo las imágenes difundidas desde el lugar por las redes sociales que mostraban cómo las llamas comenzaron afectando el techo, cuyas dos terceras partes quedaron consumidas,

Pasado el mediodía (para Bolivia), 18.50 hora local (Francia)- (16:50 GMT), se veía también cómo se desmoronaba la aguja central de la construcción, una torre añadida en el siglo XIX al templo medieval y que en la actualidad estaba rodeada de un andamiaje por obras de reparación.

La causa del incendio no fue confirmada, pero las autoridades sostienen que podría estar vinculada a estos trabajos de renovación que se realizan desde hace semanas.

Cuando las llamas empezaron en el techo de la catedral, se escucharon fuertes explosiones, reportaron testigos desde el lugar, según agencias de noticias locales.

Al inicio de la noche, bomberos seguían trabajando en la extinción del fuego, aunque las autoridades señalaron que esperan que la estructura del templo se mantenga en pie, igual que su emblemática fachada. Después de las cero horas de hoy martes (hora de Francia), se informó que el fuego estaba controlado.

Según BBC News, inicialmente no se reportaron personas heridas, dado que el templo ya estaba cerrado al público en el momento del siniestro, pero el jefe de los bomberos, Jean-Claude Gallet, explicó que hay al menos un herido grave entre los miembros de su equipo.

El secretario de Estado francés del Interior, Laurent Nunez, rechazó algunas críticas recibidas por la no utilización de helicópteros o aviones para sofocar el fuego, dado que la estructura de Notre Dame ya estaba muy débil, antes del incendio y por eso la estaban reparando.

“El lanzamiento de agua desde el aire habría sido extremadamente peligroso, frente a lo dicho en redes sociales”, dijo después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se preguntara también en Twitter por qué no se estaban empleando aviones cisterna en las labores de extinción.

El año pasado, la Iglesia Católica en Francia lanzó un llamado urgente para recaudar dinero y restaurar la catedral, que estaba empezando a sufrir un importante deterioro, además de mostrar grietas en las paredes.

Desde la tarde, miles de personas se reunieron en las calles cercanas a Notre Dame para seguir de cerca el siniestro. Algunos observaban las llamas en silencio, otros lloraban y otros rezaban o entonaban himnos.

La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, calificó de “incendio terrible” el suceso e hizo un llamado a que las personas en los alrededores eviten la zona y permitan el trabajo de los bomberos.

El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que sus pensamientos estaban con “todos los católicos y todos los franceses” y canceló un discurso público que tenía previsto ofrecer a la nación.

“Como todos mis compatriotas, estoy triste esta noche al ver cómo esta parte de nosotros se quema”, expresó. En su cuenta de Twitter también anunció que hoy se lanzará una campaña de recolección de fondos a nivel nacional e internacional para la reconstrucción del templo.

Construida entre 1163 y 1345 en la Île de la Cité, Notre Dame de París es una de las catedrales góticas más antiguas y la tercera más grande del mundo, después de la de Colonia (Alemania) y Milán (Italia).

Según la página web de la catedral, unos 13 millones de personas la visitan cada año (unas 30.000 al día, como promedio).

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