Salida por puerto de Ilo

La falta de costa marítima perjudica mucho a Bolivia, particularmente al comercio de exportación e importación. Después del conflicto con Chile en 1879, con la aplicación del Tratado de Paz de 1904 los bolivianos perdimos territorio marítimo. Desde entonces las negociaciones con Chile para recuperar una salida al mar han sido siempre negativas, lo que provoca postergación para Bolivia.

Actualmente el transporte de productos debe ser hecho en puertos ajenos mediante barcos mercantes, pagando fletes altos, lo que encarece costos.

En estas condiciones aparece la posibilidad de solucionar en alguna medida la falta de acceso al mar con el puerto de Ilo, que está situado al sur del Perú, en Moquegua, a 467 kilómetros de distancia, desde La Paz. Ilo tiene siete terminales portuarias, de éstos, uno es del Estado peruano, los demás son privados. ENAPU es puerto administrado por el Estado peruano. Este puerto tiene una extensión de 300 metros hacia el mar, si se lograra aumentar 200 metros más sería óptimo. Pero hay que construir rompeolas, para que se pueda trabajar todos los días del año. Actualmente no es operable todos los días, por la presencia de olas, que deben ser disminuidas, reiteramos, construyendo rompeolas.

La situación se complica cuando hay oleaje o tiempo lluvioso, porque los barcos que llegan con carga de Bolivia tienen que esperar en el mar hasta que pase el oleaje. Por otro lado, el terreno de la costa donde deben anclar no es profundo, por lo cual barcos grandes no pueden navegar en la costa peruana, sino que tienen que hacerlo mar adentro. Esta es una gran desventaja.

Por estos factores de estructura, los exportadores bolivianos prefieren llevar su mercadería por puerto Matarani, lo que aumenta el costo de las mercaderías. Como se ve, la salida por el puerto de Ilo tiene problemas que dificultan en gran manera el comercio boliviano exportador e importador.

Por otra parte, de acuerdo con el fallo de la Corte Internacional de Justicia, con sede en La Haya, Chile no está obligado a negociar con Bolivia la concesión de una salida al mar. Pero lo que más nos perjudicará en el futuro es la tendencia política opuesta de los gobiernos de los dos países.

Y es que Chile tiene actualmente un gobierno constitucional considerado de derecha, con acción diplomática y apoyo de bloques de derecha, mientras en Bolivia está vigente un régimen socialista. Por ello el acercamiento diplomático no es fácil, debido al antagonismo político de ambos países. Así no puede darse un avance diplomático para solucionar el problema de Bolivia y tenga acceso soberano al océano Pacífico.

Después de más de un siglo del conflicto armado entre Chile, Perú y Bolivia, hasta el momento no se avizora algún indicio de solución definitiva. Aunque la prensa internacional informó recientemente que siete parlamentarios chilenos pidieron a su gobierno que se reinicie conversaciones con Bolivia.

La tendencia política de ambos gobiernos es tan opuesta, que difícilmente habrá condiciones ideales para negociar. Habrá que esperar mejores situaciones para volver a pedir negociar una salida al mar para Bolivia. Nuestro país nunca claudicará en expresar su derecho de salida al mar, porque no podemos quedarnos encerrados entre montañas. Estamos seguros de que llegará la hora de la Justicia, y tarde o temprano los bolivianos tendremos un puerto propio, por la razón y la justicia.

El autor es Profesor Emérito de la UMSA.