Transnacional del crimen organizado

El presidente de la República de Colombia, Iván Duque, en referencia a la situación de Venezuela ha calificado a ese régimen dictatorial como: “La transnacional del crimen organizado”, y es que en el hermano país, cuna del libertador Bolívar, se han reunido, en defensa de ese régimen de oprobio, los más diversos grupos del terrorismo internacional, el narcotráfico, el castro comunismo y el crimen en general, incluyendo a la mafia rusa, apadrinada por el presidente ruso Putin.

En esas condiciones la liberación del sufrido pueblo venezolano se torna difícil, por el riesgo de que se produzca un baño de sangre, y aunque la comunidad internacional ha condenado al régimen de Maduro -cerca de 60 países reconocieron al presidente de la asamblea legislativa y presidente encargado del gobierno, señor Juan Guaidó, y más de tres millones de personas han huido de su patria y millones de venezolanos padecen hambre y miseria-, el régimen no cae, pues además del aparato militar corrupto que lo sostiene, son los grupos del crimen organizado que sostienen a esa dictadura.

No faltan en el panorama internacional voces extraviadas que en defensa abierta o hipócrita del dictador Nicolás Maduro, claman por la no intervención externa en los asuntos internos de los Estados, doctrina internacional que ha sido limitada cuando los Derechos Humanos son gravemente vulnerados, como es al caso venezolano, en el que los habitantes están privados de los más elementales bienes y servicios para subsistir, como alimentos, medicinas, agua, luz etc., pues sería honesto que quienes defienden a esa dictadura, vayan a Venezuela a padecer esas carencias.

Resulta un grave agravio a la memoria del grande Simón Bolívar, Libertador de cinco naciones y promotor de la democracia y las libertades, que en su nombre y principios doctrinales del “bolivarianismo” un reducido grupo de criminales ahogue al pueblo venezolano en la más oscura miseria, persiga, reprima y asesine en las calles y prisiones a los jóvenes y defensores de su libertad. Solo en los últimos 360 días asesinaron a más de 300 personas y durante las dos décadas de gobierno se calcula en 300 mil las personas que perdieron sus vidas y libertad.

La Sociedad Bolivariana de Bolivia, fundada en 1925, centenario de la República de Bolivia, conformada desde ese tiempo por destacados intelectuales y académicos, ha condenado en varias oportunidades al régimen dictatorial del “chavismo-madurismo” y reivindicado el nombre del Libertador y su doctrina de democracia y libertades.

Fue el mismo Bolívar que en sus sabios pensamientos expresó: “Más me cuesta mantener el equilibrio de la libertad que soportar el peso de la tiranía”; “El imperio de las leyes es más poderoso que el de los tiranos”; “Solo la democracia, en mi concepto, es susceptible de una absoluta libertad”. Estos y otros muchos pensamientos que hacen a la doctrina bolivariana, son radicalmente opuestos a todo régimen de violencia, opresión y tiranía, como el del socialismo “chavista” de Venezuela.

Así como Bolívar y los ejércitos colombianos bajaron a esta parte de América para luchar por la libertad ante el colonialismo hispano, ahora debemos subir a liberar al hermano pueblo de Venezuela, pues la libertad no solo se la consigue con lucha y esfuerzo, sino que se la defiende permanentemente, pues en caso contrario se la puede perder.

Ya es tiempo que en las tierras liberadas por la espada de Bolívar, de América Latina y del mundo en general, erradiquemos con firmeza todo atisbo de dictadura que restrinja las libertades de los pueblos a cualquier título, pues los argumentos en nombre del pueblo son el pretexto para someter al mismo pueblo a la esclavitud. Este siglo -como lo expresamos en su inicio- debe ser el siglo de las plenas libertades.

El autor es Politólogo y Abogado.