Gobierno anunció incorporar “control social” en la Policía

El ministro de Gobierno, Carlos Romero, anunció ayer que dentro del plan de reestructuración de la Policía Boliviana no se descarta la incorporación de control social como mecanismo de anticorrupción ante el descrédito que enfrenta la institución del Orden, el anuncio fue realizado ayer en Oruro, durante el acto de clausura de la Precumbre de Seguridad Ciudadana de los departamentos de occidente.

“Si la Policía no asume una profunda transformación, si en nuestra institución policial no se asume un cambio de mentalidad estamos perdidos. Le voy a recordar todos los días al comandante de la Policía, (general Vladimir Calderón), que dijo prefiero quedarme con 100 policía honestos a tener miles de policías involucrados en hechos de corrupción. Esperemos que sus definiciones no sean solamente coreográficas, sino sean reales”, remarcó la autoridad.

Romero lamentó que debido a los malos policías está en la mira de todo el país, inclusive fuera del país, “y solo la Policía debe ser capaz de revertir esa situación”, remarcó el ministro sectorial, tras señalar que esta gestión de gobierno es la que mayor apoyo le ha prestado, inclusive quintuplicando su presupuesto.

“Hemos multiplicado en ocho veces su parque automotor, hemos, le hemos instalado tecnología la hemos defendido de los ataques que recibía hemos instalado un servicio aéreo policial, la hemos apoyado y algunos malos policías nos traiciona”, lamentó Romero.

“CORTAR LA RAÍZ NO LAS RAMAS”

En criterio del jurista Jorge Santisteban, exoficial de Ejército, la incorporación del control social en la Policía Boliviana no tendrá ningún éxito porque pondrán a elementos afines al Gobierno, el único mecanismo para una efectiva reestructuración de la Policía es la voluntad política de parte de las autoridades nacionales y de los mandos policiales.

“El movimiento de personal no es reestructuración, sino mover las esferas estructurales de mandos superiores. El hecho de cortar las ramas secas y no la raíz, como en este caso meter a la cárcel al excoronel Medina y al capitan Moreira, no es respuesta. El problema será resuelto investigando a la cadena de mando, las órdenes de destino y quienes los ratifican por más del tiempo establecido”, apuntó el jurista.

En este mismo sentido señaló como “imperativo devolver a la Policía la institucionalidad asignado cargos por mérito y no por confianza, como ha ocurrido y ocurrió con la designación del coronel Jhonny Aguilera, el nuevo Comandante de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de Santa Cruz”, hecho que en criterio de Santisteban es un agravio a muchos otros oficiales de Policía altamente capacitados.

Otro elemento de suma importancia para efectuar un proceso de reestructuración policial serio y efectivo –señaló– tiene que ver con la investigación de fortunas de las altas autoridades policiales, porque deben guardar racionalidad respecto los ingresos de un empleado público con 20 años de servicio, que dentro la realidad nacional difícilmente podría llegar a sumar un millón de dólares.

NUEVAS MEDIDAS

En tanto, el Ministro de Gobierno anunció un nuevo paquete de medidas estructurales como parte del proceso de reconstrucción de la Policía Boliviana, medidas que dará a conocer en la Cumbre de Seguridad Ciudadana, prevista para junio próximo, en la ciudad de Trinidad, Beni.

“Tenemos que tomar medidas transversales para una profunda transformación en la Policía”, remarcó la autoridad del Estado.