Yandal Smith fusiona el flamenco con la danza árabe

La alegría del flamenco y la sensualidad de la danza del vientre se fusionan para dar vida al baile del flamenco árabe, cuya interpretación llega a La Paz de la mano de la bailarina Yandal Smith, nombre artístico utilizado por Lesli Rodríguez, una boliviana que aprendió estás técnicas en España y Turquía.

Cabe recordar que el flamenco es una danza típica de Andalucía (España) que se caracteriza por la música y el baile. Y tiene sus variedades de acuerdo con el lugar que se lo baile, es bastante expresivo, porque intervienen todas las partes del cuerpo: pies, piernas, caderas, brazos y manos.

A diferencia de la danza del vientre que es una de las más antiguas del mundo y se la practica en la mayoría de los países árabes, entre ellos Egipto, Líbano y Turquía, como parte de su cultura. La danza árabe turca se caracteriza por su alegría, energía y sensualidad en sus movimientos del torso y cadera.

“La danza desde niña siempre fue mi pasión y con el paso del tiempo se convirtió en uno de mis mayores sueños. Fue gracias a la providencia que se me presentó un viaje a España, lugar en el que aprendí a bailar flamenco y fui parte de algunos elencos de baile en ese país”, recuerda Yandal.

Pero, no conforme con saber flamenco también le llamó la atención el baile del vientre y para perfeccionar esta danza viajó a Turquía, país en el que terminó fusionando ambos bailes, en lo que vino a denominar el flamenco árabe, que es lo que Yandal realiza en la actualidad.

“Llegué a Turquía sin conocer el idioma con el propósito de aprender la danza del vientre, no entendía la música, pero bailaba intuitivamente, busqué trabajo y me contrataron, porque sabía bailar flamenco y un poco de danza árabe, esta última que fui perfeccionando en una escuela de danza”, explica la artista.

DANZA FUSIÓN

La unión del flamenco y la danza árabe fue primordial para el éxito de Yandal, quien fue tras el sueño de convertirse en una bailarina profesional y lo consiguió en dos países, donde no conocía a nadie, tuvo que superar muchos obstáculos para finalmente alcanzar este objetivo.

“La música en el flamenco tiene que ver con la guitarra, la caja, el zapateo, el movimiento de las manos y la voz del cantante. En la parte árabe la darbuka es el instrumento de percusión que emite ritmos con ayuda de las manos, y dependiendo de la técnica utilizada se pueden sacar efectos”, afirma Smith.

Yandal cuenta que para cada presentación lleva ambas vestimentas. En la parte externa la ropa para bailar flamenco y en la parte de la falda, por debajo está la indumentaria para la danza del vientre que en determinado momento lo utiliza cuando las notas musicales así lo anuncian.

“Para el flamenco recojo mi cabello con una flor y para la danza del vientre suelto mi cabellera para realizar ciertos movimientos con la cabeza al ritmo de las notas musicales, pues combino el movimiento de pies, rodillas, cadera, cintura, pectoral y brazos para mi interpretación”, enfatiza Yandal.

LA ARTISTA

Nació en La Paz y concluyó sus estudios de bachillerato en el Liceo Dora Smith en Bolivia. Luego viajó a España para estudiar danza en la Escuela de interpretación y danza El Horno en Madrid. Posteriormente, en Estambul (Turquía) aprendió el belly dance. De ahí en adelante se dedica a la presentación de su arte.

“La danza para mí es mi motor de vida, mi principal motivación y mi pasión. Al interpretarla me gusta pensar que puedo dar un mensaje a los que quieran como yo luchar por sus sueños, que pese a las dificultades que se presenten siempre deben ir tras aquello que les haga feliz”, dice emocionada la artista.

Smith asegura que aprendió muchos de los gitanos, tanto en España como Turquía, pues tuvo la suerte de ser aceptada en ese círculo, no sólo por su tono de piel, sino porque se mostró muy receptiva al aprender de su cultura y, desde luego, la danza al son de sus contagios ritmos.

“Pese a que mis padres no estaban de acuerdo en que yo sea bailarina, porque lo veían como algo malo. Tuve que luchar contra viento y marea para viajar y conseguir mis sueños y gracias a Dios lo logré. Al salir a Europa fui una bailarina muy cotizada por ser latina y porque al interpretar transmitía lo que sentía”, agrega Yandal.

Ahora que está de retorno en el país transmite los conocimientos adquiridos impartiendo clases de la danza del vientre en el estudio “Dance with me”, en horario matinal.