Luto, dolor y miedo se vive en Trinidad Pampa, en cuyas calles velaron el cuerpo del cocalero Miguel Coico. Según el testimonio de Tatiana Coico, la noche del sábado fueron violentamente atacados con machetes y chuchillos. Querían matar a su madre, Nancy Huanca, y ella se interpuso y su cuerpo recibió las certeras puñaladas.
La afectada aseguró que los sindicados no se encontraban en estado de ebriedad y que actuaron con tal violencia contra los dos jóvenes y la señorita que les ocasionaron heridas de muerte. Tatiana fue apuñalada ocho veces, tiene dos heridas a la altura del pecho y el resto en diferentes partes del cuerpo.
Entretanto, autoridades del Gobierno sostienen que es un conflicto familiar, y después de más de 24 horas del crimen no detienen a los autores a pesar de estar identificados.