Fraude electoral en preparación

El Tribunal Supremo Electoral tiene el claro propósito de preparar el fraude electoral que necesita el Jefe de los cocaleros y del MAS. Saben que el pueblo está indignado con la corrupción y el narcotráfico, que el descontento y el repudio crecen inconteniblemente. Saben que la población está harta de tanta ambición personal, egolatría, despilfarro, soberbia y descaro.

Indudablemente el TSE es el instrumento que el gobierno está utilizando, cuidando todos los detalles que pudieran impedir la manipulación. Todo lo prepara para lograr el resultado deseado. Abiertamente este organismo electoral cumple con las tareas que le vienen encomendando desde la mal llamada “Casa Grande del Pueblo”, que es el centro de actividad y campaña electoral que utiliza el MAS, es el centro de todo el apoyo logístico, desde donde instruyen al TSE los pasos a seguir para lograr sus fines innobles.

En el TSE han alejado a expertos y técnicos que manejan controles y cómputos. Necesitan que estén fuera todos los que pudieran oponerse al fraude.

En conocimiento del hecho ilícito es que renunció la ex-presidenta del órgano electoral y se nombró a una masista que se suma al desesperado intento de Evo Morales de perpetuarse en el poder ilegalmente.

Los miembros del TSE y Tribunales Electorales Departamentales tendrán que contribuir a armar un sistema de cómputo manipulable. Quienes conocemos sistemas informáticos sabemos que ello es posible para dar a la realidad la forma técnica que haga falta. El sistema actual solo precisa una estructura que permita manipular la Base de datos. Necesitan manipular a conveniencia los resultados. Se necesita técnicos afines al Gobierno, sin ética profesional, bien pagados. Los quieren obedientes, serviles, obsecuentes.

A otros no queda más que despedirlos. Sería peligroso que detecten los cambios.

Son los pasos que dan uno a uno. Son los que hemos visto. Después de desconocer el referendo del 21 de febrero de 2016, desobedeciendo el mandato del pueblo tienen que hacer las gestiones que faltan para continuar en el sillón presidencial y en el poder acompañados por la mediocridad, la corrupción y el encubrimiento político, además de evitar ser enjuiciados.

Dilapidan los recursos del Estado para alcanzar sus desmedidas ambiciones y utilizan a los del TSE, los mismos que por su conducta incurren en ilicitud.

El pueblo viene soportando años de ira contenida. Pero vigilamos los movimientos políticos del actual régimen. Denunciamos sin descanso los atropellos que están matando a la democracia. Tenemos que continuar en la lucha. Tenemos que alcanzar el respeto y la dignidad que merecemos como bolivianos. Tenemos que hacer que sean transparentes las actividades en nuestra Patria.

La autoestima y la dignidad tienen que imponerse en Bolivia.

Deberán ser castigados, sancionados todos los que no están respetando el ordenamiento jurídico vigente.