En su segunda visita al país, el ex presidente español José Luis Rodríguez Zapatero deja una estela de censuras y críticas por su obvia y explícita intromisión en la política interna de Bolivia, en pleno proceso preelectoral, tanto más por ostentar el cargo de Consejero de Estado de España, gracias al cual el canciller Diego Pary le otorgó un carácter de visita oficial, aunque dicho estatus se reserva a los mandatarios de alto rango.
Su gira por La Paz, Potosí, Sucre y Santa Cruz, levemente barnizada de académica para jóvenes, se desenmascaró como eminentemente política. Se inició en Capinota, junto al presidente Evo Morales en la entrega de una obra. Allí empezó su rosario de alabanzas: dijo que Morales en 15 años “hizo más que los 77 presidentes anteriores” y que Bolivia era conocido como el país más pobre de la región. Si bien los extranjeros no tienen obligación de conocer la historia de otros países, es mejor que no incurran -como Zapatero- en comentarios históricos falsos o, al menos, discutibles.
En el nuevo Palacio de Gobierno, dio muestras de haber olvidado o improvisado el discurso, tocando el aspecto borrascoso de la aún incierta paternidad o no del presidente Morales con Gabriela Zapata, su pasada pareja. La llamó fake new (noticia falsa), “la más grosera y repugnante que yo he conocido”, dijo. Nadie puede referirse sin pruebas en la mano a un tema cualquiera y menos darlo por falso. El supuesto hijo fue bautizado, si lo fue, como Ernesto Fidel, en homenaje a los dos personajes modélicos de Evo Morales.
Todo este canasto de loas se une a la campaña electoral en la que se halla dedicado por entero el Jefe del Estado, matizada por figuras foráneas -ahora harto desgastadas-, entre las que figura Luis Almagro y habrá que esperar la de algún otro sátrapa comedido. Parece que el señor Zapatero se ciñó lealmente al libreto propagandístico del que fue dotado, en la marcha reproductiva del poder a cargo del oficialismo. Colaboraciones políticas foráneas como ésta no se cotizan por la campaña del MAS, sino que se las carga al Tesoro General del Estado.
Entre el 2004 al 2011 el visitante fue presidente español, gestión que coincidió sino con el inicio de la crisis económica y financiera de ese Reino, sí con su agravamiento, acompañado con el desempleo o “paro” de tres millones de trabajadores, situación que determinó que el partido izquierdista (PSOE) de Zapatero pierda la elección de 2011 a manos del Partido Popular y se le haga responsable del desastre.
Usurpado el 7 de octubre de 1970, por defender EL DIARIO |
Dirección:
Antonio Carrasco Guzmán
Jorge Carrasco Guzmán |
Rodrigo Ticona Espinoza |
"La prensa hace luz en las tinieblas |
Portada de HOY |
Caricatura |