Crece corriente para candidato opositor único

La tendencia hacia la polarización de las dos principales corrientes en la lucha electoral -la defensora de la Constitución y la anticonstitucional sostenida por el oficialismo- se ha acentuado con notable intensidad en días recientes; primero con la renuncia del candidato presidencial Jaime Paz Zamora y, enseguida, la presentación de la renuncia de Edwin Rodríguez a la candidatura vicepresidencial de la capilla encabezada por el senador Óscar Ortiz.

Para completar esa corriente dirigida hacia una candidatura presidencial única, (sin contar la deserción de Luis Revilla), plataformas electorales de Santa Cruz (Jóvenes Unidos y Resistencia Solidaria) se alejaron también de la capilla “Bolivia dijo No”, buscando la unidad en torno a una sola fórmula presidencial.

La carta de renuncia del potosino Edwin Rodríguez se destacó por su sentido concreto de orientación nacional y democrática. “He renunciado -sostuvo con firmeza-entendiendo que la verdadera unidad se construye en los hechos y no con palabras, porque pretendo una Bolivia democrática y porque amo a mi pueblo y mi patria y quiero vivir en democracia. Estoy convencido que esta acción patriótica servirá para contribuir a la unidad de la oposición que logrará la recuperación de la democracia y derrotará al ilegal binomio oficialista”.

“Presento -agrega- formalmente mi renuncia irrevocable a la candidatura a la vicepresidencia, por la alianza política electoral denominada ‘Bolivia dijo No’”, conceptos que confirman la seguridad de su posición en defensa de la moral política, tan venida a menos en la actualidad.

Por los aspectos referidos se observa en forma general la creciente consolidación y ampliación de la fórmula de la legalidad, sostenida por la opinión pública en contra de la ilegalidad oficialista expresada en la eternización del candidato presidencial.

Por otro lado, un representante, Harry Parada, de las plataformas orientales que sostuvieron su propio criterio, afirmó sin rodeos: “Hemos peleado estos tres meses para que se haga respetar el voto ciudadano. No nos estamos vendiendo, no somos traicioneros. Nosotros planteamos nuestra actitud para confiar en ellos, pero éstos no han hecho lo mismo”.

Finalmente en directa observación de los hechos y al margen de criterios de valor, se encuentra la posible división de los pequeños partidos políticos de oposición y la migración de gran parte de sus seguidores hacia la consolidación de la unidad de la ciudadanía en torno a un solo candidato presidencial de la oposición, de acuerdo con la relación de fuerzas políticas en la dialéctica electoral actual.