Parpadea para activar el zoom en tus lentes de contacto

Poco a poco vemos como la tecnología se va incorporando a nuestras actividades cotidianas, en este caso tendremos la capacidad de poder ver más cerca mediante un zoom incorporado en lentes de contacto. La ciencia nos permite mejorar la calidad de vida del ser humano y ahora nuestra vista podrá beneficiarse de este nuevo adelanto.

Los lentes de contacto que usamos actualmente ya son en sí mismas un invento capaz de dejar sin palabras a una persona de otro tiempo, así que ¿por qué no llevarlas más allá? La Universidad de California en San Diego ha conseguido programar unos lentes para que amplíen la vista siguiendo nuestras órdenes.

Te encuentras en plena calle y no consigues leer un cartel o reconocer a una persona a lo lejos. Parpadea dos veces como si fueras un superhéroe y los lentes harán zoom por ti para que puedas ver mejor ese detalle en la lejanía.

El mal uso de las lentillas supone un peligro para el planeta

A modo de binoculares estos lentes responden a los estímulos eléctricos de nuestras órbitas oculares. Un parpadeo, girar los ojos hacia un lado u otro, este tipo de movimientos detectados por un lente sensible activan la función creada por los investigadores de San Diego.

Más que un lente, se la puede considerar un robot blando cuya principal función es ampliar su distancia focal cuando la persona se lo indique con el movimiento de ojos. Ni siquiera es necesario que el portador del lente pueda ver, un invidente también podría mover si ojo ocular voluntariamente y activar esta función.

El lente está fabricado con polímeros que se expanden cuando se aplica corriente eléctrica, es decir, cuando movemos los músculos de los ojos. No obstante, las pruebas no se han realizado solamente con un ojo humano, sino con una artificial que contaba con electrodos rodeando el globo ocular donde se sitúa la lentilla.

Los robots blandos o suaves se les conoce también como robots biohíbridos y combinan la robótica con células o tejido muscular vivo. La electricidad o la luz provocan que el tejido celular se contraiga y doble el esqueleto artificial del robot, haciendo que este se arrastre o incluso nade.

El objetivo de este proyecto sencillo, dotar al ser humano de una visión mayor de la que hemos tenido hasta ahora e incluirla en el día a día, aunque por el momento es un prototipo inicial que tardará en llegar al mercado.