Policía asedió feria de excarcelados

Managua.- La Policía de Nicaragua asedió ayer una feria de artesanías realizada por manifestantes excarcelados y sin empleo, que buscan obtener ingresos ante la crítica situación económica que viven.

Decenas de antimotines y agentes especializados en operaciones especiales, ataviados con armas de guerra, rodearon la feria, que se desarrolló en un templo católico de la ciudad de Matagalpa, en el norte de Nicaragua, país que atraviesa una crisis sociopolítica que ha dejado cientos de muertos.

Un momento tenso predominó en las primeras horas de la feria, cuando los policías llegaron hasta el portón del templo, pero eso no dispersó a los excarcelados ni a sus clientes, quienes blandieron la bandera de Nicaragua, un acto que el Gobierno del presidente Daniel Ortega considera subversivo.

"¡No tenemos miedo!" y "¡Viva Nicaragua libre!" fueron algunas de las consignas que gritaron a lo largo del día los participantes de la feria denominada "Feria de Artesanías Azul y Blanco", por los colores de la bandera nicaragüense.

Los excarcelados, entre ellos ingenieros, médicos, intelectuales, estudiantes, académicos, campesinos y obreros, son personas que han guardado prisión por haber criticado o participado en protestas contra Ortega desde el estallido social de abril de 2018. Estando en la cárcel, los manifestantes aprendieron a elaborar artesanías, y esas habilidades ahora les sirven para subsistir, ya que no encuentran empleo debido a la situación económica devenida del conflicto local, porque los empleadores temen problemas con el Gobierno, o porque sus negocios son víctimas del boicot oficialista.

"La feria es una oportunidad que los excarcelados tenemos para llevar algo (dinero) a las casas, ya que el Gobierno no nos deja trabajar", dijo el excarcelado Roberto Cruz.

En la feria, que se realiza de manera itinerante en diferentes ciudades de Nicaragua, los opositores ofrecen carteras, camisetas, bolsos, aretes, pulseras, rosarios y cofres, entre otros productos hechos a mano, en su mayoría de colores azul y blanco, con precios de entre 1 y 10 dólares.

Los excarcelados dicen ser "presos políticos" porque no fueron encerrados por cometer delito, sino por protestar contra Ortega, y aunque salieron de la cárcel bajo una polémica Ley de Amnistía, consideran que esta no les dio libertad real, ya que el Gobierno ha reiterado que puede capturarlos nuevamente y acusarlos de los delitos amnistiados.

La crisis de Nicaragua ha dejado cientos de muertos, presos y desaparecidos, así como decenas de miles en el exilio.

Además, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que responsabiliza al Gobierno de cometer crímenes "de lesa humanidad", ha contado al menos 326 muertos en 15 meses de crisis, organizaciones locales indican 594 y el Gobierno admite 200. (EFE)