Las flamas de la hoguera cobran fuerza mientras un amauta deposita una gran mesa con sullos, misterios y todas las ofrendas a la Pachamama, mientras alrededor, toda una familia rodea la fogata y el responsable hace sonar una pequeña campanita.
Si es agosto y según la cosmovisión andina de los amautas o guías espirituales que conservan los saberes y conocimientos de las civilizaciones prehispánicas, es el mes denominado también en aymara como “laqam phaxsi” (mes cuando se alimenta la Pachamama), “por lo que se debe cumplir con la ofrenda de agradecimiento”.
Es por eso que mucha gente visita las apachetas o lugares sagrados, con mucha fe para ofrecer sus “wajtas” (ofrendas) a la Pachamama ya que la cosmovisión andina señala que en el mes de agosto la madre tierra “abre su boca” para recibir aliento.
“La Pachamama tiene hambre, abre su boca este mes, recibe todas nuestras ofrendas, hay que dar sin medir y luego ella nos entrega el doble. Es pedir a nuestra tierra para que se cumplan nuestros deseos y agradecer por todo lo que se nos da”, dijo Apolinar Sanka de la Asociación de Amautas Tupac Katari de la Ceja de El Alto.
En las diferentes apachetas (altares en los caminos) cercanas a la ciudad de La Paz y en la ciudad de El Alto, se reunieron cientos de creyentes y amautas para dar inicio a los rituales de agradecimiento, que tradicionalmente se realizan a lo largo de este mes, preferentemente los días martes y viernes.
RITUALES
El ritual andino es realizado principalmente en apachetas y fue donde este sábado en la madrugada se registró gran afluencia de gente.
Las comerciantes del sector del mercado de los brujos en la Ceja de El Alto, informaron que agosto es el mes más rentable para la venta de productos, como dulces, coca, fruta, nueces, incienso, cigarro, alcohol, leña y suyus (fetos de llama), entre otros elementos necesarios para realizar la wajta y pedir abundancia.
“Se consagra a la Pachamama para que nos vaya bien, para que nos siga dando, hay que alimentarla armando una mesa con dulces, coca, etc. Una buena mesa se prepara sin medida, hay desde 50 bolivianos hasta 400, pero no hay que medir, todo hay que darle” señaló Lázaro, amauta paceño.
Los rituales incluyen el encendido de fuego, la cocción de elementos dulces, además de hierbas aromáticas, como la koa y el sullu o feto de llama, serán ofrendados a la Pachamama durante agosto en un ritual que se repite desde hace milenios.
La Pachamama (Madre Tierra) es reverenciada durante el mes agosto con elementos rituales que son agrupados en una mesa de color o mesa blanca, acompañado con típicos ingredientes del contexto, que suele ser el alimento espiritual de la divinidad telúrica.
La Pachamama como divinidad andina, es la bendita tierra integral del rito, establecida como fuente de la fecundidad. Ella cuenta con dos generadoras de vida en el universo la Illa (Deidad que reproduce el reino animal) e Ispalla (Deidad que multiplica el reino vegetal).
Estas siempre van articulando las actividades cotidianas con el desarrollo natural y el proceso ceremonial comunicativo de extensión ritual, dimensionado en los cuatro espacios vitales, denominados: Jana Pacha (En mundo de la envoltura superior más allá del celaje).
Alax Pacha (el mundo de arriba o celestial) Aka pacha (el mundo telúrico o planeta tierra) y Manqha pacha (el mundo de abajo o de la oscuridad), donde el valor de la pacha, desde su trascendencia mítica, es un claro ejemplo de persistencia que fortalece el horizonte de la identidad.
Portada de HOY |
1 Dólar: | 6.96 Bs. |
1 Euro: | 7.61 Bs. |
1 UFV: | 2.30985 Bs. |