El futuro que preocupa

Actualmente el mundo enfrenta una crisis por la que los problemas se multiplican en forma alarmante. Uno de los mayores problemas es la desigualdad que sufre la humanidad; como consecuencia de la explosión demográfica mundial, pues hay 80 millones de seres humanos más cada año. En la próxima década tendrá más de 8.000 millones de habitantes el planeta tierra, provocando la mayor crisis de alimentos y agua potable, que serán insuficientes para satisfacer a la humanidad.

Otro factor que atenta contra la población es la incertidumbre que vive por ataques y atentados terroristas y también los conflictos armados de los países desarrollados; esto con el fin de ejercer dominio y hegemonía mundial. De esta manera, amenazan con iniciar una guerra mundial, con bombas nucleares y misiles, atentando contra la paz del mundo.

A todo ello se suma la alteración climatológica del planeta, por el calentamiento y el efecto invernadero, ocasionados por los gases de las grandes fábricas, industrias, el parque automotor e incendios en el mundo, causando el rápido deterioro del medio ambiente, la atmósfera, lo que ocasiona el derretimiento de glaciares de los polos; como ocurrió recientemente en Islandia, que despidió al glaciar Okjokull con 700 años de edad. Todo ello causa los desastres naturales en el planeta tierra.

Otro peligro que se cierne sobre la humanidad es el vertiginoso avance de la tecnología robótica, alterando profundamente la forma de vida humana. Se pronostica que, en los próximos diez años, los robots reemplazarán al hombre en casi en todas las actividades.

En los países que desarrollaron esta tecnología, ya causa preocupación que los robots estén reemplazando rápidamente a la mano del hombre. Estos humanoides son capaces de realizar todo tipo de trabajos, como: cirugías médicas complejas, enfermería, seguridad, justicia, banca, comercio, construcciones, etc.; lo que provocará un desempleo masivo y sin precedentes en el mundo. Y esto está dando lugar a otro peligro, ya que en la próxima década es posible que los robots lleguen a gobernar el mundo. A finales del siglo pasado se decía que la humanidad estaba “borracha” del pasado, hoy se puede decir que estamos “borrachos” del futuro.

En nuestro país no es menos esta preocupación, por los alarmantes incendios forestales de bosques y la depredación de tierras con sobre explotación de minerales, gas, petróleo, con derrame de elementos químicos, contaminación de ríos y lagos. Los ejemplos son el caso del lago Titicaca, que podría morir y los ríos Pilcomayo, Madidi, La Paz, Beni, Piraí, etc.

A todo ello aún se suma otro problema, la falta de fuentes de empleo, como consecuencia de la inundación de los mercados del país con mercaderías y productos extranjeros de contrabando y comercio ilegal, que afectan enormemente a la industria nacional. Hoy se ofrece productos y servicios hasta por internet, dejando a mucha gente sin empleo.