Internaron a Perú droga refinada

La extensión de la frontera con el Perú como establecen los registros de la enciclopedia libre da cuenta de una amplia frontera desde el río Desaguadero que nace en el lago Titicaca, descargando el agua excedente. En la parte más próxima a la embocadura con el lago Titicaca, formando la laguna Aguallamaya de 96 km², hay un primer y corto tramo de 14 km que forma la frontera natural entre el Perú y Bolivia, por donde suelen internar droga refinada.

Otro de los espacios fronterizos está por ejemplo en el sureste, cruzando el departamento de La Paz y luego el departamento de Oruro, donde desemboca en el lago Poopó, tras un recorrido de 436 km. El río pasa cerca de las localidades de Calacoto, Ulloma y Puerto Japonés, donde son aprovechados por gente inescrupulosa, que continúa utilizando el territorio nacional como espacio de tránsito.

La Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) dio cuenta que si bien en la actualidad se logra mayores resultados por el decomiso de droga de origen peruano, en la actualidad dicho proceso logra modificarse, con la finalidad de obtener mayores ganancias, por lo que las personas involucradas con el ilícito ahora buscan internar droga purificada (cristalizado), con la finalidad de incrementar sus costos.

“En el departamento de La Paz y la ciudad de El Alto se ha convertido, en una zona de tránsito, donde los traficantes de droga, buscan diferentes modos de introducir la droga obtenida en el vecino país del Perú. El ingreso de la droga se realiza desde puestos legales, como Desaguadero, Puerto Acosta, o por otras vías no legales, como las rutas alternas con la finalidad de que estas drogas puedan ser trasladadas a otros países como Chile, Argentina, Paraguay, Brasil, con la finalidad de lograr el incremento de precio uno de los investigadores de la instancia policial de narcóticos quien pidió reserva de identidad, al darse a conocer comunicados sobre niveles de información oficial.

Las aguas de lago Titicaca y del río Desaguadero, de acuerdo con la autoridad policial, son las que suelen ser utilizadas, para el traslado de droga, debajo de los botes pequeños, los cuales son los que arrastran la droga por debajo de las aguas de estas vías lacustres.

VÍA DE PREFERENCIA

Para los efectivos de la Felcn, la vía de preferencia para la internación de droga del Perú es por Desaguadero, donde se logró la detención de más de 15 personas aprendidas de nacionalidad colombiana, quienes tienen como modo de operar, “es que ellos llegan desde Colombia, pasan por Ecuador, Perú e ingresan a territorio boliviano, vía Desaguadero, con la finalidad de ingresar marihuana oculta en su equipaje, mochilas, cuerpo, catreras de plástico, entre otros enceres”, añadió.

Si bien la interrogante de la autoridad es por qué, estas personas del extranjero ingresan marihuana desde Colombia, cuando existen plantaciones en el territorio nacional, siendo la respuesta la calidad de la “pureza” o grado de TC (tetra caramidol), que corresponde a las sustancias alucinógenas.

De acuerdo con los costos de mercado se establece que un kilo de marihuana colombiana puesto en Chile tienen un valor de 1.700 dólares americanos, mientras que la misma cantidad de marihuana nacional, tienen un valor de Bs 800 hasta 1.000, como resultado de su “calidad”, aspecto que es analizado en los laboratorios correspondientes.

En cuanto a la internación de cocaína, en la actualidad se observa que de aproximadamente 500 kilos que fueron secuestrados en la presente gestión el 50 % corresponde a pasta base y el 50 % a clorhidrato de cocaína, aspecto que se conoce como cristalizado de cocaína.

Esta internación de este tipo de droga genera un incremento de los costos, tomando en cuenta que la pasta base, conocida en la jerga policial como “ladrillo”, tienen un valor de 1.000 dólares americanos, mientras que el purificado o clorhidrato de cocaína, conocido como cristal tienen un costo de 2.000 dólares, en La Paz. El precio se incrementa más cuando este llega a la frontera a un valor de 4.000 dólares americanos.

En tanto, el cristalizado que se realiza en territorio boliviano, por el costo de producción tienen a tener un mayor valor, tomando en cuenta que la instalación de un laboratorio y producir el cristalizado tienen un valor aproximado de más de 500 mil dólares, por lo que el costo de clorhidrato esta en 2.800 a 3.000 dólares americanos.