Como todos los años, al recordar su onomástico Roberto Barbery reunió a sus amigos en los salones del Círculo de la Unión para compartir un almuerzo.
El 16 de agosto es una fecha que nunca pasa desapercibida para los allegados al cumpleañero y, por supuesto, las manifestaciones de afecto no se dejan esperar, por lo que desde las primeras horas de la mañana de ese día, Roberto recibió llamadas y felicitaciones.
Al mediodía todos llegaron puntuales para cantarle el cumpleaños feliz en medio de abrazos, presentes y brindis acompañados de buenos augurios.